Cómo preparar un auténtico perol cordobés con carne de cerdo, pollo y conejo

Aprende a hacer el mejor perol cordobés con carne de cerdo, pollo y conejo en pocos pasos y con ingredientes fáciles de conseguir, que tus comensales seguramente amarán.

El perol cordobés es mucho más que un plato tradicional, es un símbolo de convivencia, una receta que ha acompañado durante generaciones a las familias y cuadrillas de amigos en Córdoba. Cocinado al aire libre, en grandes cazuelas, este guiso mezcla carnes, arroz y verduras en una combinación que resume la riqueza de la gastronomía andaluza y que todavía hoy sigue despertando el mismo entusiasmo en quienes lo disfrutan.

Lejos de ser un plato reservado a festividades, el perol cordobés se disfruta tanto en celebraciones populares como en encuentros informales, convirtiéndose en la excusa perfecta para reunir a la gente alrededor del fuego. Su preparación, que incluye carne de cerdo, pollo y conejo, lo convierte en un manjar completo y contundente, ideal para compartir en cualquier época del año. Se trata de un guiso que no solo alimenta el cuerpo, sino también la tradición y el espíritu de comunidad que define a la tierra cordobesa.

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Preparación paso a paso de este plato cordobés

»Plato de perol cordobés hecho en famoso restaurante de Córdoba». Fuente: TripAdvisor

Para preparar un perol cordobés debes comenzar con un buen sofrito, que es la base sobre la que descansará el resto de la receta. En una cazuela amplia, preferiblemente al fuego de leña o butano para aportar ese sabor ahumado tan característico, empieza a añadir aceite de oliva para pochar la cebolla, los pimientos y el tomate rallado. Una vez tengas listo el sofrito, debes incorporar las carnes troceadas de cerdo, pollo y conejo, que debes dorar bien para sellar sus jugos y aportar ese sabor característico al guiso que tanto lo distingue.

Con lo que debes seguir es con añadir el arroz, el pimentón y las hojas de laurel, removiendo bien para que se impregnen de todos los sabores del sofrito y la carne. Después de esto, debes cubrir la mezcla con el caldo caliente y dejarlo cocinar lentamente hasta que el arroz alcance el punto exacto en donde esté tierno pero suelto, con todo el sabor concentrado. En ese momento, sentirás que el perol cordobés despliega todo su aroma, invitando a reunir a los comensales alrededor de la cazuela para disfrutar juntos de la comida.

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