En medio de una serie de éxitos que parecen haber revitalizado a RTVE, el presidente de la Corporación pública, José Pablo López, se enfrenta a un cúmulo de críticas que amenazan con empañar su gestión.
Aunque la cadena ha experimentado una recuperación en términos de audiencia con programas de renombre como ‘La Revuelta’, ‘Late Xou’, ‘Mañaneros 360’, ‘Malas lenguas’ y ‘Futuro imperfecto’, la sombra de la politización y la gestión opaca está ganando terreno dentro y fuera de la institución.
Los últimos movimientos bajo la presidencia de José Pablo López están haciendo que algunos cuestionen la imparcialidad de la cadena. La apuesta por ‘Mañaneros 360’ y ‘Malas lenguas’, de tendencia progubernamental, está transformando a La 1 en un canal que refleja una política más alineada con el Gobierno, que recuerda que el PP hizo lo propio en RTVE y lo hace en las televisiones autonómicas que controlan.
Mientras que en otros momentos políticos RTVE se ha visto acusada de estar demasiado cercana a los intereses conservadores, hoy parece haber cambiado de bando, con un claro énfasis en presentar contenidos que favorecen a la administración socialista.
Esto se materializa no solo en los contenidos, sino también en la estructura misma de los programas. Los tertulianos que pueblan estos debates, en su mayoría de ideología progresista, dominan los espacios de actualidad, dejando un espacio marginal para voces más conservadoras.
Este sesgo está comenzando a generar un descontento generalizado, especialmente entre los sectores más conservadores de la sociedad y dentro de la oposición política. En este contexto, el Partido Popular había comenzado a levantar la voz, denunciando lo que consideran un uso partidista de RTVE en detrimento de la pluralidad informativa a cuenta de una polémica protagonizada por Sarah Santaolalla.
Pero en Génova 13 finalmente han levantado el pie contra la gestión de López.
MEDIAPRO
Uno de los aspectos más polémicos de la presidencia de José Pablo López es su relación con Mediapro, el gigante de la producción audiovisual. Tras perder el contrato de los derechos técnicos de los partidos de LaLiga, Mediapro ha encontrado en RTVE una suerte de refugio económico.
A través de contratos millonarios, la productora ha logrado posicionarse como la principal proveedora de contenido para la cadena pública. El problema radica en la concentración de poder en manos de Mediapro, lo que despierta sospechas sobre un posible conflicto de intereses. Programas como ‘La Revuelta’, ‘Malas Lenguas’, ‘Futuro imperfecto’ se han convertido en los pilares de la programación de RTVE que también lanzará ‘Directo al grano’ de la mano de la factoría catalana.

La crítica principal es que este apoyo continuo a Mediapro recuerda a los tiempos en los que, bajo gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero, la productora fue beneficiada por decisiones políticas, lo que se tradujo en una mayor influencia mediática en el panorama español.
La pregunta que muchos se hacen es si esta relación no está comprometiendo la independencia de RTVE y si, de alguna manera, Mediapro no está aprovechando la situación para fortalecer su dominio dentro del sector audiovisual en España. Esta dependencia de una sola productora también ha generado dudas sobre la pluralidad de las voces y los puntos de vista que se ofrecen en los contenidos emitidos por la televisión pública.
SOMBRA DE ENCHUFISMO
Otro de los grandes puntos de fricción en la gestión de José Pablo López ha sido el nombramiento de Felipe del Campo como director de Teledeporte, una decisión que, según denuncian algunos sindicatos, responde a intereses personales. Del Campo, amigo cercano de López, parece haber recibido una plaza diseñada a medida para él, lo que ha despertado acusaciones de enchufismo.
Este tipo de decisiones, sumadas a la creciente preocupación por la falta de transparencia en otros nombramientos dentro de RTVE, ha alimentado la percepción de que la cadena pública está siendo gestionada como un coto privado, lejos de los principios de meritocracia y objetividad que deberían regir en una institución pública.
A este malestar se suman las críticas a la estructura del Consejo de Administración de RTVE, que se considera desbalanceado y a favor del bloque político de investidura. Con salarios superiores a los 100.000 euros anuales, muchos ven en este Consejo un órgano político que no refleja la pluralidad necesaria para garantizar la independencia de la corporación.
COLORÍN
Otro gran foco de críticas hacia José Pablo López ha sido su apuesta constante por la producción de realities y programas de entretenimiento, lo que ha sido interpretado como un intento de dar un giro hacia un modelo más comercial y sensacionalista.
A pesar de que los intentos de formatos como ‘La familia de la tele’ fracasaron estrepitosamente, López parece decidido a seguir apostando por este tipo de contenidos. En particular, se destacan dos nuevos proyectos de la productora Banijay: ‘DecoMasters’ y ‘Hasta el fin del mundo’, que se sumarán a la longeva y polémica ‘MasterChef Celebrity’.
Mientras tanto, el presidente de RTVE ha descuidado proyectos informativos de mayor enjundia, como el regreso de ‘La 2 Noticias’.