La provincia de Almería esconde un secreto a voces que resuena con ecos de espuelas y disparos lejanos, un paisaje que te transporta directamente a una película del Oeste. Y es que este rincón andaluz es mucho más que sol y playa, ya que el Desierto de Tabernas es el único desierto propiamente dicho de Europa, un escenario de cine al alcance de tu mano que te dejará sin palabras.
Pero, ¿y si te dijera que el mejor momento para descubrirlo no es en pleno verano, bajo un sol de justicia? Este territorio cinematográfico se transforma por completo en octubre, cuando el calor sofocante da paso a una temperatura ideal para la aventura, convirtiendo la experiencia de explorar esta maravilla natural en algo absolutamente inolvidable y apto para todos los públicos.
UN RINCÓN DE HOLLYWOOD BAJO EL SOL DE ANDALUCÍA
Cierra los ojos e imagina a un joven Clint Eastwood entrecerrándolos ante el sol implacable. No, no estás en Arizona. Estás en esta tierra de cine, donde Sergio Leone encontró el escenario perfecto para sus spaghetti westerns, rodando aquí clásicos como ‘El bueno, el feo y el malo’ o ‘La muerte tenía un precio’. Un lugar que cambió la historia del cine para siempre.
Aquellos decorados de leyenda siguen en pie, desafiando el paso del tiempo y el viento del desierto. Hoy puedes pasear por sus calles polvorientas, ya que los poblados del Oeste como Oasys MiniHollywood ofrecen espectáculos en vivo que recrean la magia y la acción de aquellas producciones de Hollywood en el sureste peninsular, haciéndote sentir parte de la película.
¿POR QUÉ OCTUBRE ES EL MES SECRETO MEJOR GUARDADO?
Olvídate de los cuarenta grados a la sombra que castigan estas tierras áridas en julio y agosto. El otoño trae consigo un respiro, un regalo en forma de clima, porque en octubre las temperaturas suaves permiten explorar el desierto durante todo el día sin riesgo de insolación y con una luz dorada absolutamente mágica que lo tiñe todo. Es, sencillamente, el momento perfecto.
Esta climatología ideal no solo afecta a tu comodidad, sino que lo cambia todo por completo. Los paisajes almerienses se visten de ocres y sombras alargadas que realzan su belleza, haciendo que la fotografía se convierta en una auténtica delicia para aficionados y profesionales, permitiendo capturar la esencia de este lugar único en el mundo con una atmósfera especial e irrepetible.
A LOMOS DE UN CABALLO, LA AVENTURA TE ESPERA
Si hay una manera de fusionarse con este entorno y entender su inmensidad, es subido a un caballo. Recorrer las ramblas secas y los imponentes cañones es una experiencia inmersiva, ya que las rutas ecuestres guiadas te llevan por los mismos lugares que pisaron las estrellas de cine, sintiendo el eco de la historia y la aventura bajo los cascos.
No necesitas ser un jinete experto para vivir esta aventura en la Andalucía más sorprendente. Existen opciones para todos los niveles y edades, desde paseos tranquilos para principiantes hasta rutas más exigentes para los más atrevidos, porque las empresas locales adaptan la experiencia para que cualquiera pueda sentirse un auténtico cowboy por un día en este escenario de leyenda.
MÁS ALLÁ DEL DESIERTO: CALAS ESCONDIDAS Y PUEBLOS BLANCOS
A muy poca distancia del escenario del Far West, el paisaje da un giro de 180 grados que parece casi imposible. Aquí te espera el Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar, un paraíso donde Almería despliega calas vírgenes y acantilados de origen volcánico que se precipitan sobre un mar de aguas increíblemente cristalinas, un espectáculo para los sentidos.
Pueblos como Níjar, con su encanto de casas encaladas y su rica artesanía local, son la parada perfecta. La costa de Almería en otoño es una auténtica delicia, ya que playas icónicas como Mónsul o Los Genoveses se pueden disfrutar casi en soledad, lejos del bullicio del verano, regalándote una paz y una conexión con la naturaleza difíciles de encontrar.
SABORES QUE CUENTAN HISTORIAS: LA GASTRONOMÍA DEL DESIERTO
El esfuerzo de cabalgar por el desierto abre el apetito, y esta tierra sabe cómo recompensarlo con creces. La cocina local es un fiel reflejo de su paisaje, austera en apariencia pero intensamente sabrosa, ya que platos como las migas o los gurullos con conejo son recetas tradicionales pensadas para dar energía y que hunden sus raíces en la historia de supervivencia de la zona.
Y al caer la tarde, nada como el sagrado ritual de las tapas en cualquier bar de la zona. Es el momento perfecto para compartir las anécdotas del día, porque el tapeo aquí en Almería es una cultura que te permite probar pequeñas delicias, desde un cherigan hasta pescado fresco, poniendo el broche de oro a una jornada inolvidable en un rincón único de España.