Cuando hablamos de la tortilla de patata es normal recordar el sabor familiar, donde el olor a cebolla impregnaba toda la casa y ya sabías la sorpresa que iba a salir de la cocina. Sin embargo, la tortilla de patata no puede irse en agua y tampoco puede quedar seca como un ladrillo. En tal sentido, te traigo la receta definitiva para hacer una verdadera obra gastronómica.
La tortilla de patata es uno de esos platos que van geniales a cualquier hora del día. Por ejemplo, en la hora de la comida, en la cena, o por qué no, coger un pinchito del día anterior, calentarlo y comerlo con gusto en el desayuno. Es sin duda, una de las alternativas más versátiles para integrar en tu menú. Además, también exploraremos a lo largo de este artículo, dos recetas extras para ganarle a la rutina y ahorrar tiempo en la cocina.
5OTRO ACOMPAÑANTE QUE VA GENIAL CON LA TORTILLA DE PATATAS
La sopa de tomate es un plato que se puede disfrutar caliente o frío y acompañado con tostadas, te deja chupándote los dedos. Esta receta fácil y nutritiva. Ideal para una cena ligera, solo necesitarás los siguientes ingredientes para hacer la sopa de tomate como todo un chef Michelin:
- 6 tomates picados por la mitad
- 2 cebollas picadas por la mitad
- 1 cabeza de ajo pelada
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Sal y pimienta al gusto
Para preparar esta sopa de tomate no necesitas de muchas complicaciones. En un bol, pon los tomates y las cebollas picadas con los ajos y mezcla bien con el aceite de oliva, la sal y la pimienta. Llévalos a la freidora de aire por 10 minutos y listo. La piel del tomate ya se ha despegado; retira la piel y mezcla todos los ingredientes hasta obtener que todo se integre adecuadamente, y listo.
Sin embargo, si no tienes mucho tiempo para cocinar, la crema de alcachofas que se vende como plato preparado en varios supermercados, hace que comer sano no sea tan complicado. Por eso, los nutricionistas la recomiendan porque es ideal para una cena ligera o una comida hipocalórica.
