Con el regreso a la rutina a tope, la dieta se convierte en un factor clave para mantener a raya los catarros estacionales. Y seguro te preguntarás ¿por qué? Para nadie es un secreto que la llegada del otoño es la temporada predilecta donde los virus golpean con más fuerza; un momento perfecto para reflexionar sobre cómo cuidas tu sistema inmunológico. Sin embargo, existe una práctica milenaria que mejora completamente la salud respiratoria y emocional.
Se trata de la práctica de «Pranayama», que promete aumentar la capacidad de fortalecer la eficiencia respiratoria, aliviar los síntomas del asma y del catarro en cuestión de segundos. Además de este método milenario, a lo largo de este artículo descubrirás la receta definitiva para atacar y prevenir el catarro; hasta una revelación importante por parte de la Ciencia que contradice a aquellos que se niegan a aceptar que la proteína de origen animal no es necesaria para el bienestar general del organismo.
5UNA DIETA SIN PROTEÍNA TE HACE VULNERABLE A LOS CATARROS

Con el catarro de otoño al acecho, la reflexión sobre cómo cuidas tus defensas revela que no solo la carne es vital, alimentos ricos en vitamina C y antioxidantes completan la lista de lo necesario para reforzar tu sistema inmunológico. De esta forma, la ingesta de proteína animal se corona como un factor indispensable para mantener a raya los resfriados de vuelta a la rutina.
Del mismo modo, es importante resaltar que estas afirmaciones se basan en muestras científicas, no es un debate sobre si el veganismo es malo o no. Existen muchas personas que no son veganas, disfrutan de una barbacoa al aire libre y tienen las defensas por el suelo ¿y por qué?, la respuesta es simple, porque no consumen las cantidades necesarias de proteína que su cuerpo necesita. Por lo que un buen balance en tu dieta es esencial para una vida óptima y cargada de mucha salud.
Desde carnes, pescados y huevos, hasta lentejas y garbanzos, todos aportan proteína, todo recae en la calidad que ofrece la de origen animal tras su consumo. Si eres una persona que por nada del mundo soporta platos que incluyan ingredientes de origen animal, es necesario hacer una reflexión. Sin embargo, tu nutricionista tendrá la última palabra, además existen suplementos dietéticos que fácilmente te ayudan a alcanzar estos requerimientos diarios.