El Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) avisó hasta 149 veces de crecidas irregulares por lluvia el 29 de octubre de 2024, día de la tragedia de la DANA. Los avisos, en modo de alarmas, se producen cada vez que el sistema detecta lluvia acumulada por encima de valores estándar, en algunos casos por encima de 30 metros cúbicos por segundo y por otros encima de 50. El día de la tragedia el SAIH funcionó correctamente e iba advirtiendo de las crecidas mediante un sistema automático de mails.

La información, además del propio SAIH, la recibieron el Centro Nacional de Emergencia de Protección Civil (CENEM), el Grupo de Prevención y Vigilancia de Barcelona (GPVB), el Centro Nacional de Predicción de la AEMET (CNP), el Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat (CCE) y la Delegación del Gobierno en Valencia (DGV).
Los datos constan en la información recibida por la juez Nuria Ruiz, que instruye la causa por las 229 muertes tras el paso de la DANA por Valencia el 29 de octubre de 2024. Las alarmas se produjeron en todos los puntos SAIH de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), pero solo se recogieron los que superan el umbral de los 30 metros cúbicos de lluvia acumulada en 1 hora o en 4 horas.

El primer aviso de que algo grave ocurría llegó a las 5.37 horas del día 29 con el texto. Los avisos llegan con unos minutos de retraso y en este caso la alarma en Antella (Valencia), en el interior de la provincia, era por lluvia acumulada durante la última hora, un total de 34.
Tras este primer aviso irían llegando otros con cuentagotas. A las 5.57 horas el SAIH de Tous daba un dato de 33,20 metros cúbicos. Era la misma zona, un poco más al norte.

A las 8.08 horas de ese mismo día ya surgía el primer dato preocupante. Lo ofrecía el SAIH desde Carlet, una población al sur de Valencia. Carlet informaba a esa hora de 85.40 metros cúbivos durante la última hora. Después llegarían las alarmas de Buseo, Bugarra y un largo etcétera, todos por encima de los 70.

A las 15.19 horas llegaría en primera aviso relativo a Forata con 62.60 metros cúbicos en la última hora. Desde entonces todo el Centro de Emergencias (CECOPI), ya reunido, se obsesionó con la presa de Forata y su posible rotura, algo que nunca sucedió pero que mantuvo todo el interés del Cecopi sobre ella. La obsesión tenía su justificación, pero quizás eso hizo que se descuidasen los recursos y la vigilancia sobre otros lugares.

El primer aviso del Barranco del Poyo en Riba-roja, por debajo del embalse de Forata llegó a las 17.08 horas con 51.60. Justo una hora después, a las 18.09 horas el Poyo ya estaba en 53.40 metros cúbicos por segundo.
MUERTOS POR LA DANA
Ya con varios muertos en Valencia, a las 18.34 horas, el SAIH de Chiva informaba de 75 metros cúbicos acumulados durante la última hora. Pero a las 20.36 horas el mismo detector de SAIH de Chiva arrojaba un estremecedor dato de 135.40 metros cúbicos. A las 21.18 horas el dato del Barranco del Poyo era de 145.80 metros cúbicos.
Hay que recordar que la juez Nuria Ruiz, que instruye la causa por los fallecidos durante la DANA de Valencia de octubre de 2024, dictó este 15 de septiembre una providencia donde pedía la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) y a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) que «aporten datos de las lluvias en las zonas de influencia en la cuenca del Barranco del Poyo desde el 22 de octubre hasta el día 29».

Curiosamente, una diligencia similar a la que ahora solicita la juez ya fue pedida por otra acusación popular, la ejercida por Liberum, pero la magistrada denegó la misma.
La juez Ruiz pidió que «se oficie a la CHJ y a la AEMET para que, en el plazo de 5 días, aporten los datos de las lluvias en las zonas de influencia en la cuenca del Barranco del Poyo en los días previos, con una semana de antelación, desde el 22 de octubre hasta el día 29, así como de la misma cuenca del barranco, debiéndose incluir las localidades lindantes, la cabecera, la desembocadura y los barrancos que conectan, como los barrancos de la Horteta, Pozalet, Gallego y Pelos».
Asimismo, requería a estos organismos públicos para que «en dicho plazo de 5 días, informen si estos datos eran de acceso público y si la sala de emergencias del 112 dispuso de ellos o si tenía acceso a los mismos». La juez pedía también a la AEMET los mapas de probabilidad de los días previos y preguntaba si la Sala de Emergencias del 112 «disponía de estos mapas y si eran de acceso libre y público».