El agotamiento se ha convertido en uno de los males silenciosos de nuestro tiempo. No distingue edades ni profesiones y, aunque muchas veces lo disimulamos con café, optimismo forzado o rutinas automáticas, el cuerpo siempre termina pasando factura. Según un reciente estudio internacional de Salud Mental del Grupo AXA, más de la mitad de la población en España asegura sufrir estrés de forma habitual, un dato que confirma que vivimos en una sociedad acelerada donde el descanso y la calma parecen artículos de lujo.
Ante este panorama, las redes sociales han comenzado a ofrecer alternativas para combatir el agotamiento y la fatiga crónica. Una de las más comentadas es el llamado “cóctel de cortisol”, una bebida sencilla que promete reducir los efectos del estrés y ayudar a equilibrar la energía del cuerpo. El tema ha generado debate entre quienes defienden sus beneficios y los expertos que invitan a tomarlo con cautela, recordando que el verdadero antídoto contra el agotamiento está en abordar las causas, no solo los síntomas.
2Qué dice la ciencia sobre el agotamiento y el cortisol
Para entender el fenómeno, conviene recordar que el cortisol es una hormona esteroidea producida por las glándulas suprarrenales y que cumple funciones esenciales, entre las que regula el metabolismo, mantiene la presión arterial y participa en la respuesta inflamatoria del cuerpo. Es, además, la principal responsable de que podamos reaccionar ante una amenaza o desafío. Sin embargo, cuando el cortisol se mantiene alto de forma prolongada, el cuerpo entra en un estado de alerta constante que termina generando agotamiento, insomnio y cambios de ánimo.
La doctora Feyza Erenler, endocrinóloga del Centro Médico Tufts, explicó en una entrevista con ‘Health’ que las glándulas suprarrenales no se “fatigan” como a menudo se dice en redes sociales. Según ella, el agotamiento que muchos sienten no proviene de un daño hormonal, sino de la sobreexigencia y el estrés sostenido. Aunque reconoce que esta bebida viral puede aportar un poco de energía momentánea por el azúcar del zumo, advierte que no es una cura milagrosa. Además, señala que debe evitarse en personas con hipertensión (por la sal) o problemas renales (por el potasio).






