El amianto es uno de los componentes principales de la uralita, material utilizado en la construcción en el pasado siglo en España. Este elemento, formado por fibras flexibles de aluminio, hierro y silicato de cal, se utilizaba por su facilidad de fabricación y su precio.
Lamentablemente, la ciencia ha demostrado lo nocivo de este componente. Por eso, desde hace unos años se ha iniciado un proceso de retirada segura de uralita en Madrid y en el resto de los puntos de España.
Es en el inicio de este siglo cuando comienza un proceso de sensibilización frente al amianto. Prohibida su comercialización en la Unión Europea desde 2005, la legislación nacional ha ido avanzando hasta que en 2006 se aprobó el Real Decreto 396/2006, conocida como la ley integral del amianto, donde se establece la retirada paulatina de este material.
Desde entonces, empresas, particulares y comunidades de vecinos han ido poniendo en marcha procesos sobre sus propiedades y contando con profesionales especializados en la gestión segura de uralita en Madrid.
En la actualidad, existen servicios muy especializados en la inspección de materiales como pintura, techos, tuberías o baldosas, el diseño de planes de eliminación y la retirada segura del amianto.
¿Qué puede contener amianto? La presencia del material nocivo en hogares e industria
La uralita es el tipo de material más vinculado al amianto. Este fibrocemento que está en tejados de trasteros y naves industriales es uno de los componentes de construcción más habituales de los que se han usado.
Pero estas fibras nocivas para la salud no solo se encuentran ahí. Y este es el principal problema al que se enfrenta cualquier empresa de retirada de uralita en Madrid: los usuarios no saben dónde tienen que buscar y, por eso, existen inmuebles en los que todavía se mantiene.
Desatascos Henares es una empresa que se dedica a este tipo de encargos. Estos especialistas detallan una lista de elementos en los que todavía hoy se encuentra el amianto en grandes cantidades:
- Cámaras de aire, techos y paredes cortafuegos: comunes en el ámbito industrial, en ocasiones no se identifican por estar recubiertos por láminas de metal.
- Tuberías: en el pasado se utilizaban tuberías de fibrocemento, que son el elemento que más problemas da en los inmuebles o en las comunidades de vecinos.
- Mobiliario de jardín: mesas y bancos que se diseñaban para soportar los cambios climáticos solían estar compuestos por materiales ricos en amianto.
- Tejidos ignífugos: la ropa preparada para esta función en el ámbito laboral solía utilizar el amianto por sus altas capacidades ignífugas.
La retirada segura de la uralita
El Ministerio de Sanidad cuenta con una completa guía con directrices para la retirada de uralita y que es seguida por empresas como Desatascos Henares.
Las principales medidas a tener en cuenta son:
- Retirada total del amianto identificado: los equipos con experiencia deben analizar toda la propiedad para identificar cualquier elemento con esa presencia.
- Uso de materiales de protección: los operarios deben trabajar con EPI de amianto para evitar que las fibras nocivas entren en las vías nasales, boca, oídos u ojos.
- Envasado y etiquetado: la retirada correcta de residuos de amianto deben ser etiquetadas y llevadas a vertederos especializados en manejar este tipo de materiales.
Solo de esta manera se puede obtener el certificado de eliminación de amianto que certifique que la persona, empresa o comunidad de vecinos ha adecuado sus propiedades a lo que exige la legislación actual.






