No sé si te haya pasado, pero muchas personas suelen experimentar antojos nocturnos por alimentos repletos de azúcar, ni siquiera por alternativas sanas, no te provoca una manzana o una ensalada, tiene que ser algo dulce como un postre, chocolate, pero dulce ¿te suena? Resulta que esto no se trata de que seas una persona golosa o no tengas la fuerza de voluntad suficientes para alejarte de las tentaciones que te hacen subir de peso, sino más bien todo lo contrario, es un grito silencioso de tu organismo que no debes ignorar. Así lo confirma el Dr. Samuel Bastida, un dietista de élite que comparte sus mejores consejos de nutrición desde sus redes sociales.
Recientemente, el Dr. Bastidas ha dado a conocer que esos antojos nocturnos por alimentos que son una delicia al paladar, pero nocivos para la salud si no se controlan sus porciones, va más allá de la predisposición genética o de la constancia del paciente. Se trata más bien de ciertos hábitos que te hacen explotar por la noche y cuando te das cuenta ya te has atascado de calorías vacías y grasas. Para combatir esto, es necesario hacer algunos cambios en tu rutina. Del mismo modo, se recomienda acudir a tu médico de cabecera y un nutricionista para regular estos síntomas si pasan de ser un momento esporádico a un gesto que se te hace imposible controlar.
4ALIMENTOS QUE DEBES EVITAR EN TU DIETA
Existe un hábito que es muy común entre los españoles, cambiar las comidas tradicionales por opciones rápidas que ofrecen los supermercados. Sí, esos alimentos de solo calentar y servir. Resulta que consumir alimentos procesados con regularidad, no solo te hace engordar, sino que también es perjudicial para tus riñones y huesos. Eso se debe a que son altos en sodio y fósforo. Estudios científicos han demostrado que una dieta elevada en fósforo, concretamente procedente de alimentos procesados, es un veneno que acaba con tu sistema renal.
La recomendación aquí es bastante clara y una invitación a la reflexión sobre el tiempo que le dedicas a cuidar y preparar tus alimentos para llevar un estilo de vida saludable. Volver a la cocina y desarrollar tus habilidades culinarias, es una de las etapas que te recomiendo no saltártela. Y sé que es más fácil comprar cualquier plato preparado que pasar dos horas por la noche cocinando (momento que pudiste aprovechar para dormir). Sin embargo, cuidar tus preparaciones te garantiza una alimentación más sana y alejada de productos que solo perjudican tu salud debido a la poca transparencia de sus etiquetas.






