El colesterol vuelve a colocarse en el centro del debate médico con la irrupción de una terapia que podría transformar por completo la forma en que entendemos los tratamientos cardiovasculares. En un momento en el que millones de personas conviven con cifras elevadas de colesterol y dependen de medicación diaria, surge una alternativa que promete romper con el hábito de la pastilla y mirar hacia un futuro donde una sola intervención marque la diferencia.
Este nuevo escenario se dibuja a partir de un estudio realizado en Estados Unidos que, de confirmarse en grupos más amplios, podría suponer un antes y un después para quienes llevan años luchando contra el colesterol rebelde. Los primeros resultados apuntan a una reducción drástica y sostenida en pacientes que hasta ahora no habían encontrado alivio con las terapias disponibles. La investigación no solo abre una vía innovadora, sino que invita a replantear la manera en la que se manejan los desórdenes de lípidos en la práctica clínica.
1Una terapia que modifica el ADN y reduce el colesterol a la mitad
El estudio, publicado en ‘New England Journal of Medicine’, analizó una terapia de edición genética aplicada en pacientes con desórdenes de lípidos resistentes a cualquier otra medicación. A través de una sola infusión se logró reducir tanto los triglicéridos como el colesterol LDL en un promedio del 50 %, un resultado que sorprendió incluso al equipo médico de la Cleveland Clinic. Lo relevante es que el colesterol cayó de manera rápida, apenas dos semanas después del procedimiento, lo que sugiere un mecanismo potente y directo sobre las células responsables del metabolismo de las grasas.
Los pacientes permanecieron bajo seguimiento durante al menos 60 días y los niveles de colesterol se mantuvieron bajos sin que aparecieran efectos adversos graves relacionados con el tratamiento. La terapia no solo actuó con eficacia, sino con una estabilidad que abre la puerta a considerarla como opción de futuro para casos complejos. Los investigadores recalcan que podría convertirse en una alternativa real para quienes llevan años sin controlar su colesterol a pesar de intentar múltiples estrategias farmacológicas.






