El último informe de la UCO genera sombras en el multimedia afín al PNV 

El grupo mediático más cercano al PNV y que más contribuyó a la regeneración del mapa navarro tras casi dos décadas de gobiernos de UPN (1996-2015) se ha colocado en el disparadero por el último informe de la Unidad Central Operativa (UCO).

El documento, entregado recientemente al juzgado que investiga el caso Koldo, introduce nuevos elementos que proyectan sombras sobre dos figuras relevantes del entorno del Grupo Noticias, el conglomerado editorial que publica el histórico órgano de expresión jeltzale en Vizcaya, Deia, y uno de los medios más influyentes en Navarra, Diario de Noticias.

La causa, centrada en las presuntas irregularidades de Servinabar 2000 y su red de adjudicaciones, se ha convertido en un foco incómodo en un momento políticamente sensible para el PNV, formación integrada en Geroa Bai, coalición que presidió el Gobierno de Navarra entre 2015 y 2019 con Uxue Barkos y que desde entonces forma parte del Ejecutivo foral como socio estable del PSN-PSOE.

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LA TRAMA

El informe de la UCO señala que Servinabar 2000 articuló parte de su actividad a través de una filial, Alegure, «con todavía menos estructura», pero que aun así recibió adjudicaciones relevantes. Una de ellas, emitida por el Gobierno de Navarra, se produjo en UTE con Acciona para las obras de un colegio en Arbizu, entre Vitoria y Pamplona.

En Alegure figuraba un 4% del capital a nombre del empresario Iñaki Alzaga, que es presidente del Grupo Noticias, editor de Deia, Diario de Noticias y otras cabeceras. A ese primer elemento se suma otro: la UCO afirma que Aritz Santamaría, hijo del director de Diario de Noticias Joseba Santamaría, habría mantenido contactos con Antxon Alonso —señalado como el principal operador dentro de Servinabar— para hacerse con otro 4% de la matriz, Servinabar 2000.

CONTRATO

El registro del domicilio de Alonso, practicado por la UCO el pasado junio, ha sido clave en esta nueva fase de la investigación. Allí se halló un contrato fechado el 1 de junio de 2016 por el que Santos Cerdán, actual secretario de Organización del PSOE, adquiría 1.350 participaciones de Servinabar, del número 1.650 al 3.000, quedándose con el 45% y accediendo al control efectivo de la sociedad.

Pero el nuevo informe aporta otro documento que complica aún más el escenario. Se trata de un contrato de compraventa fechado el 12 de diciembre de 2016, en el que figura como adquirente «Aritz Santamaría» de 120 participaciones —otro 4%—, del número 1.529 al 1.649, precisamente respetando aquellas que habrían pasado a manos de Cerdán. La UCO identifica al comprador como Aritz Santamaría Sorbet, quien en 2016 era menor de edad y es hijo del director de Diario de Noticias, Joseba Santamaría Rekarte.

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Joseba Santamaría. Foto: Grupo Noticias.

Los investigadores han constatado la presencia del propio Santamaría en la agenda de contactos telefónicos de Alonso, así como la anotación de una cita el 13 de diciembre de 2016 —un día después de la fecha del contrato— registrada como «13.00 J.Santamaria Burladero», quizá en referencia a un conocido restaurante pamplonica.

El informe añade un detalle más: ese mismo día, a las 12.38 horas, Alonso envió a su mujer una fotografía de la primera página del contrato. A las 13.56, una hora después de la reunión que supuestamente debía mantener con Santamaría, volvió a mensajearle: «Perfecto con Joseba». La UCO no extrae conclusiones firmes, pero considera relevantes estas coincidencias y las incorpora a su argumentario sobre la posible articulación de participaciones societarias a través de terceros.

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DESMENTIDO

Ante la repercusión del informe, Joseba Santamaría publicó un desmentido contundente en el que lamenta el «daño personal y profesional» causado por las informaciones. El texto, fechado el 19 de noviembre, rechaza de manera categórica cualquier relación con Servinabar: «Ni yo ni mi hijo Aritz ni nadie de mi familia tiene o ha tenido relación mercantil, económica o laboral ni vinculación alguna con la empresa Servinabar».

En otro fragmento afirma: «No es verdad que mi hijo Aritz tenga o haya tenido en algún momento el 4% ni ninguna otra participación en la empresa Servinabar… Ni yo ni mi hijo Aritz ni nadie de mi familia hemos firmado documento alguno de la empresa Servinabar».

El director de Diario de Noticias también defiende que su trato con Alonso fue siempre «más personal que profesional» y que, en el ámbito profesional, se limitó a «las relaciones normales y habituales entre un medio y una empresa».

IMPACTO

El ruido generado por el informe llega en un momento especialmente delicado para el ecosistema político navarro. Geroa Bai, donde el PNV juega un papel determinante, mantiene su alianza con los socialistas en el Ejecutivo foral.

Y aunque por ahora la coalición intenta evitar lecturas partidistas, la oposición ha comenzado a pedir explicaciones sobre la presencia de dirigentes próximos al poder político en operaciones societarias vinculadas a empresas adjudicatarias. Por ahora, las filtraciones no apuntan a responsabilidades políticas directas, pero sí colocan bajo la lupa al grupo mediático que ha sido tradicionalmente un aliado mediático del PNV y que cuenta con una prestigiosa y combativa cabecera en Navarra.

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