Se elevan a cuatro las personas fallecidas tras ser arrastradas por un golpe de mar en Tenerife. En concreto, los hechos han ocurrido este domingo en la piscina natural de la zona de Los Gigantes, en Santiago del Teide. Todas ellas fallecieron como consecuencia del fuerte oleaje que impactó en la piscina natural conocida como Charco de Isla Cangrejo, un enclave habitual para bañistas y turistas, pero que en esta ocasión se convirtió en escenario de un dramático suceso marcado por las adversas condiciones del mar.
La última víctima confirmada es una mujer que, pese a los intensos esfuerzos de los equipos de emergencia, no logró sobrevivir. Tras ser sacada del agua por los rescatistas municipales, fue trasladada hasta el muelle, donde el personal del Servicio de Urgencias Canario (SUC) le practicó maniobras avanzadas de reanimación cardiopulmonar. En un primer momento, los sanitarios consiguieron revertir la parada cardiorrespiratoria (PCR) y estabilizar a la mujer. Posteriormente fue llevada en ambulancia hasta un helicóptero medicalizado para su evacuación aérea al Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria. Sin embargo, pese a los esfuerzos clínicos, la afectada no pudo superar las severas consecuencias de la parada sufrida y falleció horas después en el centro hospitalario.
Con este último fallecimiento, el balance provisional deja cuatro personas fallecidas al que se le suma un hombre de 35 años, una mujer de 55, y otro hombre cuya edad aún no ha sido confirmada. Todos ellos fueron sorprendidos por un violento golpe de mar poco antes de las 16:07 horas, momento en el que el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad recibió el aviso alertando de que varias personas habían sido arrastradas hacia el interior de la piscina natural debido al repentino aumento del oleaje.
Golpe de mar: Canarias permanece en situación de prealerta por fenómenos costeros
El incidente no solo ha provocado fallecidos, sino también múltiples heridos. Los guardavidas del municipio llevaron a cabo un rescate contrarreloj en condiciones muy complicadas, logrando poner a salvo a siete personas. Entre los supervivientes había una persona en estado crítico y otras tres que, aunque conscientes, presentaban traumatismos y evidentes síntomas de ahogamiento. Las autoridades mantienen en marcha un dispositivo de búsqueda activa por si se confirmara la existencia de algún desaparecido adicional, ya que varios testigos aseguraron haber visto a más personas en la zona en el momento del suceso.
Según la asociación Canarias 1.500 kilómetros de costa, todas las personas afectadas eran turistas, algunos de ellos procedentes de la península y otros de nacionalidad extranjera. De acuerdo con estas fuentes, varios bañistas habrían desoído tanto las indicaciones de seguridad como las advertencias de peligro colocadas en los accesos al charco, a pesar de que el mar llevaba días registrando condiciones muy adversas.
La tragedia ha generado una profunda conmoción social. El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, expresó su pesar a través de las redes sociales, donde publicó el siguiente mensaje: «Hoy tenemos que lamentar la pérdida de vidas humanas en las costas de Tenerife. Mi más sentido pésame a sus familias y quiero recordar que seguimos en situación de prealerta por fenómenos costeros, por lo que pedimos máxima precaución».
Desde el 5 de diciembre, Canarias permanece en situación de prealerta por fenómenos costeros, con advertencias activas por mala mar. Este tipo de avisos se han hecho frecuentes en la región debido a la inestabilidad atmosférica de finales de año. De hecho, hace apenas un mes, el 8 de noviembre, otro golpe de mar causó la muerte de varios bañistas en condiciones similares.
Con estas nuevas víctimas, el archipiélago continúa encabezando las estadísticas de ahogamientos ocurridos en España durante 2025, acumulando 67 fallecimientos hasta noviembre, una cifra que vuelve a situar a Canarias como una de las comunidades más castigadas por este tipo de tragedias.






