Reme Navarro, nutricionista, sobre dormir del lado izquierdo: “Dormir de ese lado te va a ayudar a que los alimentos se desplacen más fácilmente a través del sistema digestivo”

Según la nutricionista Reme Navarro, dormir del lado izquierdo no es una manía ni una postura cualquiera, sino un gesto sencillo que ayuda al cuerpo a trabajar mejor mientras descansamos.

Dormir es mucho más que cerrar los ojos y esperar que el cuerpo haga el resto, es una actividad que condiciona cómo nos despertamos, cómo respondemos al estrés y hasta cómo digiere nuestro organismo lo que comemos durante el día. En torno a ese gesto cotidiano han nacido mitos sobre que si dormir boca abajo es peligroso, que si elevar las piernas mejora la circulación, que si descansar boca arriba es la postura más neutra. Sin embargo, cuando se mira con calma lo que dicen los especialistas, dormir deja de ser un acto inocente y se convierte en una pieza clave de nuestro bienestar.

Dormir también abre el debate de si hacerlo de ¿lado derecho o lado izquierdo? La cuestión ha generado opiniones de todo tipo, pero cada vez más voces coinciden en que la forma en la que dormimos tiene un impacto directo en la calidad del descanso y en la prevención del insomnio. Entre ellas se encuentra la farmacéutica y nutricionista Reme Navarro, que en un vídeo reciente explica por qué no todos los lados son iguales y cómo elegir el correcto puede marcar la diferencia para nuestro cuerpo.

3
Dormir del lado izquierdo en situaciones especiales

“La posición recomendada para embarazadas”. Fuente: Freepik

Dormir del lado izquierdo no solo mejora la digestión y la circulación, también se convierte en un aliado para quienes atraviesan momentos en los que el cuerpo exige un extra de cuidado. Las mujeres embarazadas por ejemplo, al dormir de ese lado reducen la presión sobre órganos sensibles como los riñones y el hígado, y favorecen que la sangre llegue con más facilidad a la placenta, lo que repercute directamente en el bienestar del bebé y en la comodidad de la madre durante la noche.

Dormir en esta postura también contribuye a reducir la acidez estomacal, un síntoma frecuente tanto en embarazadas como en personas con reflujo. Al recostarse del lado izquierdo, el contenido del estómago tiende a mantenerse más estable y evita subir hacia el esófago, lo que se traduce en noches más tranquilas y despertares menos pesados. Elegir este lado, en definitiva, no es una moda ni una recomendación pasajera, sino una forma sencilla y natural de mejorar la salud desde el momento mismo en que apoyamos la cabeza sobre la almohada.

Siguiente
Publicidad
Publicidad