El matcha ha pasado de ser una rareza japonesa a ocupar un lugar fijo en cafeterías, despensas y redes sociales en España. Su color verde intenso, su sabor particular y esa sensación de energía sostenida lo han convertido en una bebida casi aspiracional, asociada al bienestar y a un estilo de vida consciente. Pero, como ocurre con muchos alimentos que se ponen de moda, también han empezado a surgir dudas, advertencias y algún que otro mito difícil de desmontar.
En ese contexto, esta bebida se ha visto señalado en más de una ocasión como un posible enemigo del hierro y, por extensión, como un riesgo para quienes padecen anemia. Frente a este ruido, la nutricionista Zoe Luengo habla de que se puede disfrutar del matcha con conocimiento, sin miedo y sin renunciar a sus beneficios, siempre que se entienda cómo funciona dentro del conjunto de la alimentación.
3Cómo disfrutar del matcha con conciencia
Para quienes tienen anemia diagnosticada o toman suplementos de hierro, Zoe Luengo sí recomienda ciertos ajustes. El matcha puede tomarse sin problema, pero conviene separarlo de las comidas principales y de la suplementación, dejando un margen de unas dos horas antes o después para evitar interferencias.
Además, pequeños gestos marcan la diferencia, como acompañar los alimentos ricos en hierro vegetal con vitamina C, presente en frutas como el kiwi o en verduras como el pimiento rojo. De este modo, el matcha sigue formando parte del día a día sin renunciar al cuidado de la salud. La ciencia no señala al matcha como causante de anemia, y disfrutarlo con equilibrio es, para la experta, la mejor receta.






