Los grupos de la oposiciĆ³n han recriminado este miĆ©rcoles al ministro de Presidencia, FĆ©lix BolaƱos, su falta de explicaciones sobre el espionaje a independentistas o al Gobierno y sobre el cese de Paz Esteban al frente del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) y han llegado a afearle que les Ā«tome por tontosĀ» o Ā«idiotasĀ» e incluso se permita Ā«el lujoĀ» de Ā«decir lo que tienen que hacerĀ» a los portavoces de los distintos partidos.
AsĆ se lo han hecho saber durante su comparecencia ante la ComisiĆ³n Constitucional, donde ha acudido a peticiĆ³n propia para exponer el Plan Normativo del Gobierno para este aƱo y tambiĆ©n citado por los grupos que han centrado sus intervenciones en el espionaje polĆtico.
BolaƱos, por su parte, ha defendido la actuaciĆ³n del Gobierno tras conocer los casos de espionaje y ha elogiado la labor del CNI que, segĆŗn ha indicado, se dedica Ā«a salvar vidasĀ», lo hace Ā«calladamenteĀ» y actĆŗa siempre Ā«con arreglo a derechoĀ», ha apuntado.
ERC SE AUSENTA
AdemĆ”s, durante una sesiĆ³n a la que no ha acudido ningĆŗn representando de ERC, el ministro ha indicado que ahora Ā«se abre una nueva etapaĀ» para reforzar al centro en materia de ciberseguridad y Ā«afrontar con mayores garantĆasĀ» las Ā«brechas de seguridadĀ» que han detectado, dado que es Ā«evidenteĀ» que el Ejecutivo ha sufrido un ciberespionaje.
Pero estas explicaciones no han satisfecho a la oposiciĆ³n. Ā«Llevamos todo el dĆa en el Congreso, tres horas aquĆ y no ha explicado las razones del cese de la directora del CNI ĀæNos lo puede explicar de una vez?Ā», le ha llegado a espetar la portavoz del PP en la ComisiĆ³n Constitucional, Edurne Uriarte.
Desde Vox, JosĆ© MarĆa SĆ”nchez le ha echado en cara que no haya dado ninguna Ā«respuesta articulada intelectualmenteĀ». Ā«No sĆ© si es incapacidad, soy indiferente completamenteĀ», le ha soltado, quejĆ”ndose de que haya Ā«faltado al respetoĀ» a los portavoces y acusĆ”ndole incluso de mentir.
Ā«Estamos aquĆ para controlarles a ustedes en beneficio de la ciudadanĆa, se llama democraciaĀ», le ha replicado, por su parte, el portavoz adjunto de Ciudadanos, Edmundo Bal, antes de burlarse al aƱadir que al ministro sĆ³lo le ha faltado pedir a la oposiciĆ³n que se Ā«levante a aplaudirĀ» cada vez que hable Pedro SĆ”nchez.
DEMOCRACIA SIN OPOSICIĆN
Ā«Usted habla mucho de democracia, pero quiere una democracia sin oposiciĆ³nĀ», ha apuntado Carlos GarcĆa Adanero, de Navarra Suma. No me ha contestado a mi y creo que a nadieĀ», ha protestado el peneuvista Mikel Legarda.
Las formaciones independentistas le han pedido varias aclaraciones: si cuando se habla de escuchas Ā«externasĀ» se estĆ” apuntando a Marruecos, si las Fuerzas de Seguridad pudieron participar en esas escuchas a independentistas, si las hicieron agentes del CNI sin control judicial o si fueron elementos de las llamadas ‘cloacas del Estado’.
Josep PagĆØs, de Junts, ha venido a poner en duda que el Gobierno realmente quiera descubrir quiĆ©n estĆ” detrĆ”s del espionaje a independentistas desvelado por ‘Citizen lab’. Desde el PDeCAT, GenĆs Boadella, le ha retado a garantizar, si puede, que ya no hay espionaje.
A este respecto, BolaƱos ha manifestado que entiende Ā«la preocupaciĆ³nĀ» de las personas que han visto su nombre mencionado en la investigaciĆ³n revelada por ‘Citizen Lab’ y ha asegurado que al Gobierno le preocupa que se produzcan vulneraciones de los derechos fundamentales serĆa una intervenciĆ³n de las comunicaciones sin autorizaciĆ³n judicial.
ESPIADOS DE PRIMERA Y DE SEGUNDA
La diputada de la CUP, Mireia VehĆ, se ha quejado de que sĆ³lo se produzcan ceses cuando se espĆa al Gobierno, pero no cuando los investigados son independentistas, una idea en la que ha incidido tambiĆ©n la portavoz de Bildu, Mertxe Aizpurua y tambiĆ©n el presidente del grupo de Unidas Podemos, Jaume Asens.
Ā«No hay espiados de primera y de segunda, sino democracias de primera, que investigan estos casos, y de segunda, que los toleranĀ», ha dicho el diputado de En ComĆŗ, para quien aĆŗn hay que investigar para saber Ā«quĆ© pasĆ³, por quĆ© pasĆ³ y quiĆ©n lo hizoĀ», desclasificar documentos, Ā«limpiar las cloacas del EstadoĀ», derogar la Ley de Secretos Oficiales y un compromiso de no volver a utilizar programas como ‘Pegasus’.
BolaƱos, sin embargo ha rechazado estas acusaciones al asegurar que el CNI actĆŗa conforme a la ley y protege a todos los ciudadanos Ā«piensen como piensenĀ» y sin reparar en su Ā«color polĆticoĀ».
Desde PP, Vox y Ciudadanos le han seƱalado como responsable de la seguridad de los mĆ³viles de los miembros del Gobierno y han insistido en que el Ejecutivo siempre Ā«corta la cabezaĀ» a los funcionarios que no Ā«comulgan con ruedas de molinoĀ».
JosĆ© MarĆa SĆ”nchez, de Vox, ha definido todo este episodio del espionaje recurriendo a Francisco de Quevedo. Ā«Esto es un bululĆŗ; todo es bufo y ridĆculo, fanrandulero y miserableĀ», le ha espetado. Ā«Ustedes no tienen vergĆ¼enzaĀ», ha sentenciado.
En opiniĆ³n de Bal, cuando el presidente Pedro SĆ”nchez asume Ā«un fallo de seguridad en la comunicaciones de MoncloaĀ» en realidad Ā«parece que se lo estĆ” achacandoĀ» a BolaƱos. Al hilo este tema, JosĆ© MarĆa SĆ”nchez se ha preguntado si el ministro acabarĆ” Ā«cesando a un jefe de negociadoĀ» para salvarse Ć©l.
En la misma lĆnea la ‘popular’ MarĆa JesĆŗs Moro le ha preguntado directamente si no era el suyo Ā«el cese que correspondĆaĀ» por el espionaje al presidente.
Por Ćŗltimo, Carlos GarcĆa Adanero ha felicitado al ministro por haber Ā«salido limpioĀ» y victorioso de la Ā«batallaĀ» que ha mantenido con la ministra de Defensa, Margarita Robles, a la que, desde su punto de vista, Ā«ha dejado a los pies de los caballosĀ».