El dirigente de Ciudadanos y portavoz adjunto en el Congreso de los Diputados, Edmundo Bal, ha afirmado este viernes que el «bodevil» entre el PSOE y Unidas Podemos en relación con el pacto firmado con EH Bildu sobre la reforma laboral no da la imagen de «un gobierno serio».
«El carajal, el bodevil en el seno del Gobierno no transmite la mejor imagen a los españoles ni a las instituciones europeas de lo que debe ser un gobierno serio», ha advertido en dos entrevistas en RNE y Canal Sur, recogidas por Europa Press.
A su juicio, las distintas versiones que han dado los miembros del Ejecutivo de Pedro Sánchez y los representantes de cada uno de los dos partidos sobre el acuerdo suscrito el pasado miércoles con Bildu y el hecho de que no se consultara previamente con la patronal y los sindicatos han generado un «espectáculo lamentable».
En relación con esto último, ha aludido a las quejas de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) y de los sindicatos porque los tres partidos alcanzaran un pacto por su cuenta sobre la reforma laboral. «No se hacen las cosas así, sino en el marco del diálogo social», ha añadido.
Poco después de que el Congreso aprobase la quinta prórroga del estado de alarma decretado por el coronavirus –que Cs apoyó tras pactar varias condiciones con Sánchez–, el PSOE, Podemos y Bildu anunciaron un acuerdo para derogar «íntegramente» la reforma laboral aprobada por el PP en 2012.
Pasadas unas horas, un comunicado de los socialistas donde ya no aparecía la palabra «íntegramente» aclaraba que la idea era modificar urgentemente solo tres puntos de la ley vigente, y después del anuncio las distintas partes siguen dando versiones diferentes sobre el objetivo del acuerdo.
EL GOBIERNO «BLANQUEA» A BILDU
Bal ha afirmado que ese pacto es «un auténtico disparate», pues cree que no tiene sentido plantear ahora, en medio de la crisis sanitaria y económica, un cambio en la legislación laboral.
Y ha dado la razón a la ministra de Economía, Nadia Calviño, en su advertencia de que esto resulta «contraproducente» en este momento en el que España tiene que negociar las ayudas europeas para afrontar la crisis del coronavirus. «Es una imprudencia total», ha agregado.
Además, el portavoz parlamentario ha afirmado que, al firmar un pacto con Bildu, el Gobierno «blanquea a una organización política que es la continuadora de una banda terrorista» y que «no ha condenado los asesinatos» de ETA «ni ha pedido perdón a las víctimas». Esto genera «el más absoluto y radical rechazo» por parte de Cs, ha concluido.
Respecto al punto del acuerdo que prevé que la capacidad de endeudamiento del País Vasco y de Navarra «se establecerá exclusivamente en función de sus respectivas situaciones financieras», ha dicho que Ciudadanos siempre está en contra de los «privilegios territoriales».
DECISIÓN «RESPONSABLE» DE CIUDADANOS
A pesar de todo, Bal ha insistido en que su partido hizo lo correcto al apoyar el miércoles una nueva prórroga, por quince días, del estado de alarma y ha rechazado las advertencias del PP sobre la falta de fiabilidad del Ejecutivo de Sánchez por negociar en paralelo con Bildu y con Cs.
«Nosotros adoptamos una decisión responsable» y «pragmática», ha explicado, defendiendo que a veces hay que «prescindir de las siglas y los colores políticos» y huir de la «vieja política».
Según ha indicado, decidieron votar a favor porque no tendría sentido levantar el estado de alarma ahora que se está «ganando la batalla al virus» y «echar por la borda» el esfuerzo realizado por los ciudadanos durante más de dos meses de confinamiento.
Igualmente, ha recordado las medidas de apoyo económico a trabajadores, autónomos y empresarios que Sánchez tuvo que aceptar para conseguir el respaldo de Cs, así como la exigencia de que prepare un plan jurídico alternativo al estado de alarma y que durante el mes de julio tenga que seguir rindiendo cuentas ante el Parlamento.
Cs NEGOCIA CON EL GOBIERNO PERO NO LO SOSTIENE
De hecho, ha afirmado que ahora el principal objetivo de la formación naranja es asegurarse de que el Ejecutivo cumple sus compromisos. De cara al futuro, Ciudadanos seguirá abierto a negociar medidas sanitarias y socioeconómicas con el Gobierno porque «la política es negociación» y eso «es lo que reclaman los españoles».
Por otro lado, ha subrayado que los pactos del PSOE y Unidas Podemos con Bildu «se enmarcan dentro del acuerdo de legislatura del Gobierno Frankenstein», que «se sustenta» en los votos de los partidos que permitieron la investidura de Sánchez como presidente.
«Nosotros no sostenemos al Gobierno de España, no somos socios de este Gobierno, somos la oposición y seguiremos siéndolo», ha asegurado.
