Dos funcionarias, hospitalizadas tras la agresión de una reclusa en una prisión leonesa

Dos funcionarias tuvieron que ser atendidas por varias lesiones producidas por una reclusa del Centro Penitencial de Mansilla de las Mulas en León, según denuncia la sección sindical de Acaip-UGT.

El sindicato relata como el pasado día 26 de junio, poco después del recuento realizado por la tarde en el Módulo 8 de la prisión, una interna avisó a las funcionarias que estaba siendo coaccionada por su compañera de celda.

Las funcionarias subieron a planta y, una vez que comprobaron que el aviso era cierto, las funcionarias condujeron a la interna a la planta baja, al negarse la agresora a ingresar en otra celda, en espera de la decisión que tomara el Jefe de Servicios.

«Una vez allí, de súbito y sin que mediara ninguna razón ni motivo que pudiera justificarlo, la interna golpeó de forma salvaje a una de las funcionarias dejándola semiinconsciente y aturdida, pasando a propinar varios puñetazos en la cara a la otra funcionaria, golpes que hicieron sangrar por la nariz a esta última», explica el sindicato a través de un comunicado.

La llegada de dos compañeros de servicio en un Módulo cercano que, avisados de la situación, rápidamente se trasladaron allí, lograron reducir a la interna, que en todo momento opuso resistencia, y evitaron que el incidente fuese de mayor gravedad, explican.

Las funcionarias, que presentaban varias lesiones, tuvieron que ser atendidas en Urgencias de una Unidad Hospitalaria de León.

«A nuestro juicio, además de la interna que es la única responsable de la agresión, existen más culpables que lo son por omisión: la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias y los Partidos Políticos que, por una u otra razón, han venido impidiendo de forma constante, que los trabajadores de prisiones seamos considerados agentes de la autoridad en el ejercicio de nuestras funciones», lamentan.

En este sentido inciden que «muchas» agresiones no son consideradas como atentado, con lo que a los agresores les sale prácticamente «gratis», continúan.

«Nosotros somos conscientes del lugar en que trabajamos, sabemos a qué nos exponemos y que estas situaciones se pueden dar durante el desempeño de nuestro trabajo, pero también, y desde Acaip lo venimos reivindicando durante años, queremos que cuando sucedan incidentes de este tipo, las agresiones no queden en total impunidad. Porque quienes las cometen, en ocasiones, cuentan ya con que estos actos les van a salir muy baratos», continúan.

Acaip ha solicitado el traslado inmediato de la interna que protagonizó los hechos descritos.