El Gobierno, de limitar el precio de las mascarillas a lucrarse con ellas

El PSOE no ha tenido ni el más mínimo remordimiento por la polémica sobre el IVA de las mascarillas. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha asegurado la semana pasada que «hay un reglamento europeo que impide que se puedan bajar de la venta el IVA de las mascarillas» y ha comentado que «no es una decisión del Gobierno de España«. Sin embargo, y pese a que sí van a subir el IVA de las bebidas azucaradas al 21%, los demás países de la UE han aplicado a las mascarillas un impuesto sobre el valor añadido mucho más bajo que el español. De hecho, el de España es el más alto. Y ante esta polémica de María Jesús Montero, el PSOE cierra filas. El Gobierno no quería que las empresas se lucraran con la venta de mascarillas, pero ellos sí lo hacen con este impuesto.

La polémica saltó a la luz después de que un tuitero tuviera la genial idea de subir Twitter una imagen de lo que cuestan 20 mascarillas quirúrgicas en Portugal. En España, como máximo pueden valer 19,2 euros (pues el precio por mascarilla no puede ser superior a 0,96 céntimos), pero en Portugal valían 1,74. Y a raíz de este imagen, surgieron las preguntas. ¿Por qué sale mucho más barato comprarse mascarillas en otros países europeos? La respuesta no tardó en llegar, la causa era el IVA, y de ahí salió a la luz que el que aplicaba España por mascarilla era el más alto de toda la UE.

En Portugal se aplica el 6%, pero es que en otros países no se aplica nada. En Francia se aplica un IVA del 5,5%, en Alemania un 5% y en Bélgica, Holanda o Italia, un 0%. Solo supera a España otro país: Eslovenia, que le aplica un 22%. Estos datos llegaron a la ministra de Hacienda y no tardó en explicarse. Montero argumentó que no tienen ningún afán recaudatorio y que era la propia UE la que obligaba al país a mantener el IVA, pero lo cierto y verdad es que cuando se supo que otros países aplicaban un porcentaje significativamente inferior, ha callado.

No es del todo mentira lo que aseguró Montero. Pero tampoco es que España se haya esforzado en cambiarlo, como sí ha hecho Portugal. El presidente portugués Antonio Costa declaró tras anunciar la rebaja del impuesto que “la Unión Europea dijo que era ilegal pero que no plantearía ningún problema”. Pero España ha decidido cumplir la ley y seguir recaudando ese impuesto tan necesario para cuadrar las cuentas.

Si todos los españoles están obligados a usar mascarillas y a cada una, que puede tener un precio máximo de 0,96 céntimos, se le aplica un 21%, no hay más que echar cuentas y ver que ayuda a ganar algo de dinero a las arcas del Estado.

El Ministerio de Consumo fue la única administración que se mantuvo firme y argumentó que había que controlar los precios de este material indispensable para controlar la pandemia. El control del precio de las mascarillas fue obra de Alberto Garzón, que fue quien presionó largo y tendido para que el precio de este producto, de uso obligatorio, tuviera un precio razonable y se evitara especular con él. Sin embargo, resulta que mientras que Garzón evita que los demás se lucren con la venta de mascarillas, el Gobierno lo hace aplicando uno de los IVA más caro de Europa.

Solo nos gana Eslovenia, pero otros países con una economía (y deuda) similar a la nuestra, como Italia, aplican un 0% directamente. ¿Esto contraviene la normativa europea? En algunos casos sí, pero dada la situación, desde la UE no plantean problemas para que se haga, al menos es lo que aseguró el presidente de Portugal.