Los Mossos d’Esquadra desarticulan un grupo muy violento de asaltantes

Tras seis meses de investigación, los Mossos d’Esquadra han podido desarticular un grupo criminal de asaltantes que se caracterizaba por la gran violencia empleada en sus robos con fuerza. Los integrantes de la banda abordaban el domicilio de sus víctimas y las golpeaban de forma violenta para llevarse joyas y dinero en efectivo.

El grupo criminal se encontraba especializado en la comisión de robos violentos en domicilios de Cataluña, siendo detenidos sus once miembros tras varias fases operativas desarrolladas por los cuerpos policiales a lo largo de los últimos meses. Los jueces han decretado prisión preventiva para nueve de los once miembros de la banda.

La banda escogía principalmente a víctimas vulnerables que gozaban de un alto poder adquisitivo. De esta manera, trataban de asegurarse obtener el mayor botín posible y con el menor riesgo. El operativo ha permitido desarticular las cuatro células que integraban la organización.

LOS MOSSOS D’ESQUADRA INICIARON LA INVESTIGACIÓN EN JUNIO

Los agentes de los Mossos d’Esquadra iniciaron la investigación en el pasado mes de junio, después de que tres asaltantes entraran en una vivienda de Les Franqueses del Vallès (Barcelona). En este primer asalto conocido agredieron de forma violenta a una mujer de avanzada edad, la cual tenía graves problemas de salud. Además, también hicieron lo propio con su hijo de 53 años. En este hogar sustrajeron dinero, joyas, teléfonos móviles y un vehículo.

A raíz de las pesquisas policiales, los investigadores pudieron identificar a uno de los autores materiales del asalto, y este fue relacionado con otro que fue cometido en Lliçà de Vall (Barcelona) en julio. En este último, el identificado y otras cuatro personas accedieron a la vivienda de un matrimonio octogenario de alto poder adquisitivo, al que golpearon y maniataron.

Dado el ruido que originaron durante el asalto, los vecinos acudieron en auxilio de las víctimas, lo que provocó que los asaltantes se viesen obligados a abandonar rápidamente el lugar. En la huida, uno de los ladrones fue detenido por los agentes de los Mossos d’Esquadra después de caerse del tejado de una casa cercana por la que intentaba escapar.

El resto del grupo criminal logró huir del lugar de los hechos en dos vehículos. Las dos víctimas necesitaron de asistencia médica y fueron trasladadas al hospital, donde ingresaron.

Los investigadores pudieron confirmar que ambos asaltos habían sido cometidos por el mismo grupo criminal, que contaba con diferentes células para cometer robos con un modus operandi similar.

ESCUCHAS TELEFÓNICAS Y SEGUIMIENTOS PARA DAR CON EL PRIMER DELINCUENTE

A partir de la identificación de los vehículos, las escuchas telefónicas y los complicados seguimientos, los policías pudieron dar con los integrantes de la banda criminal. Las cámaras de seguridad de los alrededores de la vivienda que fue objeto del primer asalto, permitieron a los agentes disponer de decenas de horas de visionado.

En las imágenes, los investigadores pudieron ver a los atracadores abandonando el vehículo que habían robado y completaban la huida en el que habían llegado. Este vehículo constaba en los archivos de la División de Investigación Criminal (DIC) de los Mossos d’Esquadra. Así pues, a partir de la matrícula del vehículo se pudo poner nombre al sospechoso.

De esta forma se pudo obtener información relativa al primero de los delincuentes que formaban parte de la banda criminal. Tras realizar un seguimiento de este se pudo avanzar en la investigación, dando con el resto de integrantes de la red.

A la hora de efectuar sus robos con fuerzas en las viviendas tenían todos los roles perfectamente definidos. Habitualmente, uno de los integrantes permanecía en el vehículo para estar preparado para la huida, mientras que el resto de miembros cometían los asaltos. No escatimaban a la hora de golpear a sus víctimas con el objetivo de sustraer el dinero y otros efectos presentes en las viviendas asaltadas.

Los Mossos d'Esquadra han desarticulado las cuatro células que integraban la organización criminal
En los registros domiciliarios efectuados se han aprehendido tres armas de fuego, más de 7.000 euros en efectivo, joyas y otros efectos.

BUSCABAN VÍCTIMAS DE AVANZADA EDAD

El grupo criminal desarticulado por los Mossos d’Esquadra buscaba víctimas de avanzada edad y con un alto poder adquisitivo. De esta manera, se encargaban de estudiar a sus víctimas, realizando vigilancias previas, tanto de ellas como de sus domicilios. Así podían determinar qué momento era el más oportuno para poder llevar a cabo el asalto.

En el momento de cometer sus robos con fuerza no escatimaban a la hora de emplear una violencia extrema. De hecho, han existido casos en los que dejaron a sus víctimas inconscientes.

Fruto de la investigación, los agentes pudieron identificar y localizar a los integrantes de las cuatro células que conformaban la organización criminal y que cometían asaltos por diferentes puntos de Cataluña. También se les pudo relacionar con dos robos cometidos con extrema violencia en Reus y Bigues i Riells.

ROBO DE 35.000 EUROS A UN EMPRESARIO

En el pasado mes de octubre, una de las células de la organización asaltó en Reus a un empresario en su vivienda. Lo hizo cuando este regresaba de trabajar, agrediéndole y sustrayéndole 35.000 euros en efectivo, joyas y otros objetos de valor. Entre estos últimos se encontraba una colección de perfumes exclusivos.

Le golpearon hasta dejarlo inconsciente después de que el hombre asaltado forcejease con los asaltantes, llegando incluso a levantar el pasamontañas de uno de los ladrones. Esto le permitió ver el rostro de uno de los miembros de la organización criminal.

Con anterioridad, en el mes de agosto, la banda asaltó en Bigues i Riells la vivienda de un traficante de marihuana. Tras asaltarle a punta de pistola le sustrajeron las sustancias estupefacientes que había en la vivienda.

LOS MOSSOS D’ESQUADRA DETUVIERON A 11 PERSONAS

La operación, que se ha saldado con la desarticulación de la banda criminal, se ha desarrollado en diferentes fases operativas. Estas comenzaron en octubre de 2019 y finalizaron el pasado 18 de diciembre. El operativo ha concluido con la detención de once personas. Siete tienen nacionalidad española, tres dominicana y una venezolana.

Además, los agentes han practicado diferentes entradas y registros domiciliarios en las viviendas de los principales investigaciones. Entre otros efectos se han aprehendido tres armas de fuego, más de 7.000 euros en efectivo, joyas y otros objetos relacionados con los hechos investigados.

Todos los detenidos pasaron a a disposición de las diferentes autoridades judiciales competentes. Para nueve de ellos se declaró prisión preventiva.