Parlamento de La Rioja aprueba un estudio de la incidencia del COVID-19

El Parlamento de La Rioja ha aprobado hoy, en pleno, pedir al Gobierno riojano un estudio de la incidencia del COVID-19 en La Rioja, a petición del Partido Popular que, también, ha pedido test masivos pero no ha contado con el apoyo de la Cámara.

María Martín, que ha comenzado con un apoyo a los sanitarios y la repulsa a las agresiones, ha defendido la moción ‘popular’ creyendo que «si el triunfo es que La Rioja ha hecho más test habría que preguntarse en qué se ha fallado».

Ha explicado que «por responsabilidad» piden un «análisis epidemiológico» y ha criticado que «nuestros sanitarios han estado protegidos con impermeables de casa, bolsas de basura y mascarillas deficitarias». Ha añadido que «el 8 de marzo lo recordaremos siempre».

Desde el Grupo Parlamentario Mixto, su portavoz Henar Moreno, ha advertido de que apoyaba la moción, pero ha visto «poco serio» el uso de las cifras del PP y ha felicitado al Gobierno riojano por la gestión de la crisis sanitaria, «a pesar de que estaba en inferioridad de condiciones» por los recortes anteriores del PP que «destinó recursos públicos a la gestión privada».

Desde Ciudadanos, Pilar Rabasa ha creído que «sería negligente no aprender de lo ocurrido, no analizar con humildad de los errores cometidos y pensar en soluciones de mejora para evitar nuevos rebrotes».

También ha considerado «urgente definir el modelo de asistencia sanitaria a las personas mayores en residencias tanto públicas como privadas».

La socialista Sara Orradre ha especificado que, aunque iban a votar a favor de lo pedido en la moción, en realidad «ya está hecho» y «ya se conoce la incidencia del COVID-19», además de que «la oficina de Presidencia ya ha impulsado la compra centralizada» de material, con apoyo de la patronal de La Rioja.

Por otro lado, ha rechazado los test masivos, así como su petición de «canalizar la información a través de científicos solventes» y le ha acusado al PP de haber aprovechado la situación emocional de los ciudadanos para «emponzoñar y obstaculizar».

La consejera de Salud, Sara Alba, ha cerrado el debate para rechazar la «crisis moral de los oportunistas» y ha pedido no bajar la guardia «ni con el COVID-19 ni con los discursos políticos».