Para el presidente del Bajo Cinca, hay concienciación por los brotes

El presidente de la Comarca del Bajo Cinca, Marco Ibarz, ha asegurado que los vecinos de la zona se han concienciado ante la aparición de brotes por la COVID-19. «La gente ha dejado de salir a la calle, te das un paseo y se nota, hay mucha menos gente mayor y niños».

Así lo ha señalado el también alcalde de la localidad oscense de Zaidín. Las cuatro comarcas aragonesas de Bajo Cinca, Cinca Medio, La Litera y Bajo Aragón-Caspe han regresado esta semana a la fase 2 de desescalada por la pandemia del coronavirus y sumaban, este miércoles, 165 casos confirmados. Además en Zaidín se ha cerrado una empresa hortofrutícola por contagios entre los trabajadores.

Ibarz ha aseverado que los habitantes de estas zonas «han visto que hay que tomárselo en serio», han limitado sus salidas y cuando lo hacen llevan mascarilla y mantienen la distancia de seguridad.

«Está la cosa más tranquila que a principios de semana, ahora nos toca reparar el daño a la empresa», ha sostenido, en referencia a la compañía hortofrutícola de Zaidín.

Además, ha indicado que se están cumpliendo las normativas propias de la fase 2 de la desescalada, en cuanto a aforos y usos de espacios comerciales, por lo que confía que la comarca «pase cuanto antes a la fase 3 o directamente a la nueva normalidad».

¿ATRÁS EN LA NORMALIDAD?

Ibarz ha dicho que, por el momento, no se ha precisado desde el Gobierno de Aragón ni el Ministerio de Sanidad si, tras este retorno a la fase 2, las comarcas tendrán que volver a pasar por la fase 3 o se incorporarán directamente a las medidas en vigor en el resto de España, que se encuentra ya fuera de la desescalada.

El presidente de la Comarca del Bajo Cinca ha señalado también que, por el momento, no se han tomado medidas adicionales en materia de servicios sociales ni de desinfección debido a que los brotes se encuentran «muy focalizados».

Además, ha recalcado que desde la comarca están a la espera de recibir los resultados de las pruebas serológicas que fueron enviados al Hospital Miguel Servet de Zaragoza y al Hospital San Jorge de Huesca.

En cuanto a la posible afección que estos rebrotes puedan tener en cuestiones como el turismo, Ibarz ha apuntado que este tipo de actividad económica se da en mayor manera en localidades como Mequinenza, y ha recordado que este municipio «está limpio» de brotes, por lo que «en principio no hay problema para el turismo».