El TSJPV decidirá el viernes si suspende las restricciones al ocio nocturno

La Sala de Vacaciones del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) decidirá el próximo viernes si suspende cautelarmente las restricciones impuestas por el Gobierno Vasco a los establecimientos de ocio nocturno, después de que los hosteleros hayan pedido la suspensión del límite de horario de cierre de la una y media de la madrugada y de la clausura de las pistas de baile en discotecas.

Las asociaciones de Hostelería de Gipuzkoa y Bizkaia han presentado sendos recursos contencioso-administrativos este martes ante el alto Tribunal vasco contra las restricciones en el ocio nocturno decretadas por el Gobierno Vasco.

El TSJPV ha dado un plazo de 48 horas –hasta el jueves– a la Administración vasca para que plantee las alegaciones que considere oportunas a la solicitud de los hosteleros para que se amplíen los horarios en los locales de ocio nocturno y que se puedan utilizar las pistas de baile en las discotecas, según han informado fuentes judiciales.

Los hosteleros solicitaron medidas cautelarísimas –lo que supondría no tener obligación de escuchar a la parte demandada–, pero dada la importancia del caso y las repercusiones que puede tener en la salud pública, el tribunal analizará la demanda como medidas cautelares, para dar la posibilidad al Gobierno Vasco de argumentar sobre sus restricciones.

El pasado 27 de julio, el Departamento de Salud actualizó la orden publicada el 18 de junio para establecer que, en vista de la evolución de la situación epidemiológica, los establecimientos hosteleros, como bares, restaurantes, txokos o discotecas, no podrán permanecer abiertos más tarde de las 01.30 horas todos los días de la semana.

La nueva orden para hacer frente a la crisis sanitaria provocada por el coronavirus también mantenía la medida de prohibir la apertura de las pistas de baile y, en su lugar, colocar mesas.

En sus escritos de impugnación, las asociaciones de Hostelería de Gipuzkoa y Bizkaia pidieron el levantamiento de estas medidas por «razones de proporcionalidad» y por el «evidente peligro» de cierre definitivo que supondría su prolongación. También denunciaron la ausencia de medidas compensatorias que palien sus efectos y de «evidencias científicas que avalen las horas de cierre».

Será la Sala de Vacaciones del TSJPV la que decidirá, a través de una resolución que hará pública el próximo viernes, si admite, de forma cautelar, la demanda de los hosteleros o mantiene las medidas determinadas por el Ejecutivo vasco.

EN ARAGÓN

Por su parte, el Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) emitió hace escasos días un auto, fechado el 7 de agosto, por el que suspendió de forma cautelar la medida que establece el horario de cierre a la una de la madrugada de los establecimientos de hostelería para toda la Comunidad, una obligación que impuso el Gobierno aragonés el pasado 5 de agosto.

No obstante, determinó que este horario de cierre se mantendría en los establecimientos de hostelería de las comarcas de Bajo Cinca, Bajo Aragón-Caspe, Comarca Central de Zaragoza y municipio de Huesca, que se encuentran en fase dos.

El TSJ de Aragón aceptó, de esta forma, parte de las reclamaciones de la Asociación de Cafés y Bares de Zaragoza y Provincia y la Asociación de Restaurantes de Zaragoza-Horeca, que presentaron un recurso para solicitar medidas cautelarísimas, y que se les permitiera cerrar los establecimientos a la hora que marcan las condiciones establecidas en su licencia y recuperar la actividad en las barras.

El Ejecutivo aragonés adoptó el pasado 13 de julio medidas especiales en materia de salud pública para contener los brotes de la covid-19 en La Litera, Cinca Medio, Bajo Cinca, Bajo Aragón-Caspe, Comarca Central y municipio de Huesca, con la prohibición del consumo en las barras, y el 24 de julio se aprobó otra orden en la que se estableció la limitación horaria hasta la una de la madrugada en estos territorios, con excepción de Huesca capital.

El 5 de agosto la prohibición de abrir a partir de la una de la madrugada se extendió a todos los locales de hostelería y alimentación de toda la Comunidad Autónoma, con independencia de que se encontraran en fase 2 o en la nueva normalidad, y la medida, junto con las limitaciones de las otras dos órdenes referidas a los citados territorios, fue recurrida por las asociaciones de hosteleros.

En su auto, el TSJ de Aragón explicó que «razones de urgencia» fundamentan la suspensión de la medida limitativa de la orden del 5 de agosto, «ante la falta de justificación suficiente frente a la grave repercusión» que tendría la medida para el sector hostelero en plena temporada vacacional y con el carácter de generalidad del que se le ha dotado.