La debacle del PSOE abre paso a un tripartito de la derecha en Andalucía

La suma del PP (26 escaños), Ciudadanos (21) y VOX (12) permite por primera vez en el período democrático la posibilidad de que haya un Gobierno en Andalucía que no esté encabezado por el PSOE, al superar la barrera de los 55 escaños que da la mayoría absoluta en esta comunidad autónoma.

Con el 99,54% del escrutinio se constató de forma definitiva el enorme vuelco político en Andalucía, un hecho que ninguna encuesta había pronosticado. PSOE-A: 33 escaños; PP: 26; Ciudadanos: 21; Adelante Andalucía: 17 y Vox: 12 escaños. Los resultados suponen un giro histórico en una comunidad autónoma gobernada por los socialistas desde la instauración de la autonomía.

Así las cosas, ese tripartito de derechas es la opción más viable en la noche electoral del 2-D. «Proponíamos un cambio y Andalucía ha dicho que lo quiere. El cambio ha ganado las elecciones», exclamó el líder del PP andaluz, Juan Manuel Moreno Bonilla, quien tiene ahora más posibilidades de liderar Andalucía pese a su mal resultado ya que el PP perdió 7 escaños con respecto a 2013 y 24 menos que los que cosechó Javier Arenas hace dos elecciones.

EL PP, A UN PASO DE HACER HISTORIA EN ANDALUCÍA

Moreno podría hacer historia y ser el primer presidente del PP en Andalucía, pero no lo tendrá fácil. Esta fórmula inédita de PP-Cs-VOX está aún por ver que prospere. El líder de la formación naranja, Albert Rivera, dijo que su candidato, Juan Marín, se presentará a la investidura y pedirá el voto del PP y PSOE.

«Arrimadas ganó a los separatistas en Cataluña y hoy vamos a echar al PSOE de la Junta de Andalucía (…) Pedro Sánchez también ha sido derrotado en las urnas», indicó Rivera. Marín, por su parte, no dio pistas de cómo será la negociación postelectoral: «Hemos demostrado que realmente se podía ilusionar a una comunidad autónoma y seguiremos peleando para que nuestros hijos tengan mejores oportunidades». No es para menos, la formación naranja ha obtenido casi 300.000 votos más que en 2015.

La socialista Susana Díaz fue la gran derrotada del 2-D y tiene casi imposible volver a gobernar: «Hay un retroceso real de la izquierda en Andalucía», constató de inicio ya que la suma de PSOE y Adelante Andalucía se queda lejos de la mayoría absoluta. «Nosotros vamos a asumir la responsabilidad de hablar con todas las fuerzas políticas y hago un llamamiento a los constitucionalistas para que frenen a la extrema derecha», dijo dirigiéndose a PP y Ciudadanos.

Díaz insistió en que tanto el PSOE como las formaciones de Moreno y Marín son «el dique seco de contención para que no sea la extrema derecha quien decida el futuro de Andalucía«.

Los socialistas superaron la barrera del millón de votos, pero se quedaron lejos de los 1,4 millones que cosecharon hace casi cuatro años. La debacle fue de tal calibre que la propia Díaz vio cómo el PSOE perdía en su barrio sevillano de Triana. Además, quedaron por debajo de la barrera del 30% de los votos (29% al final), algo que no había ocurrido en democracia.

VOX fue la gran sorpresa de la noche del 2-D con sus 12 escaños. El partido que creó Santiago Abascal ha dado la sorpresa cinco años después de su nacimiento y con propuestas como la eliminación de las autonomías, la supresión de la ley de violencia de género o la expulsión de España de todos los inmigrantes ilegales y de los legales que cometan delitos.

Con el escrutinio casi concluido, VOX rozó los 400.000 votos, cuando hace cuatro años apenas llegó a las 18.000 papeletas en Andalucía. En estos comicios su candidato a la presidencia de la Junta ha sido el exjuez Francisco Serrano, que fue inhabilitado durante diez años por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) por alargar un día la custodia paterna de un niño para que pudiera acudir a un paso de Semana Santa.

Susana Díaz: «Nosotros vamos a asumir la responsabilidad de hablar con todas las fuerzas políticas y hago un llamamiento a los constitucionalistas para que frenen a la extrema derecha»

Santiago Abascal señaló en la noche electoral que VOX tiene la llave «para echar a los socialistas corruptos». Curiosamente, la formación ‘verde’ dudó hasta el último instante si presentarse a las andaluzas ya que le tentaba más ir a las europeas de mayo con Abascal de cabeza de cartel -a semejanza del lanzamiento de Podemos y Pablo Iglesias en 2014-.

VOX llegó a ganar en un municipio andaluz, concretamente en El Ejido (Almería), con más del 26% de los votos. Y de momento, la primera felicitación al partido de Abascal llegó en forma de tuit de Marine Le Pen.

Por cifras, el PSOE ganó en 612 municipios (51 menos que en 2015), pero de poco le sirvió. El PP, por su parte, consiguió ser la primera fuerza política en 109 (10 más que hace casi cuatro años), y Ciudadanos alcanzó dicha posición en 22 localidades, sobre todo de la provincia de Cádiz. En 2015 no logró quedar primero en ningún municipio andaluz.

La coalición Adelante Andalucía quedó primera en 29 municipios (19 más que Podemos e IU en 2015), pero ninguna es relevante. Y VOX logró la victoria en el citado pueblo almeriense de El Ejido.