La candidata del Partido Popular a la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, tiene un punto débil en su currículum laboral, según varios dirigentes de la oposición consultados por MONCLOA.COM que adelantan que utilizarán este hecho durante la campaña electoral.
La elegida por Pablo Casado para intentar mantener para el PP la Comunidad de Madrid («la región más abierta, la casa de todos los españoles» en palabras de la propia Díaz Ayuso en su perfil de Linkedin) ha desarrollado toda su carrera profesional en puestos orgánicos del PP, al igual que su mentor político, sin pasar por el sector privado.
Nacida en 1978 y licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense, obtuvo luego un diploma de estudios avanzados en Comunicación Política y aparece como «doctoranda» de la misma disciplina en la citada universidad, lo que significa que no ha concluido todavía la citada investigación.
Ha sido directora de cursos de comunicación política en distintas universidades y ha realizado prácticas en medios informativos de España, Irlanda y Ecuador; pero sorprende la falta de presencia en empresas privadas ya que prácticamente dio el salto de la universidad al departamento de Comunicación del PP, donde ha estado en diferentes puestos en los últimos 14 años.
En 2011 fue elegida diputada en la Asamblea de Madrid y en la siguiente legislatura ostentó el cargo de portavoz adjunta del Grupo Parlamentario Popular hasta su nombramiento, en septiembre de 2017, como viceconsejera de Presidencia y Justicia en el Ejecutivo de Cristina Cifuentes.
Presidenta del Comité de Afiliaciones del PP de Madrid, ha sido responsable del área nacional de información digital del Partido Popular desde la llegada de Casado a la sede nacional de Génova.
«POBRE» CURRÍCULUM DE DÍAZ AYUSO A OJOS DEL PSOE
Mientras que el PSOE ve un «pobre» currículum en ella, en Ciudadanos se subraya que Díaz Ayuso apenas ha tenido experiencia de gestión a lo largo de su trayectoria laboral, lo que la sitúa en una situación delicada ante el presupuesto que tendrá que gestionar si sucede a Ángel Garrido en la sede de la presidencia madrileña en la Puerta del Sol.
Sin embargo, desde Vox se valora de forma positiva el que Díaz Ayuso tenga un discurso muy parecido al suyo en el terreno del feminismo. La presidenta provincial de la formación verde en Madrid, Rocío Monasterio, desveló hace un mes en Periodista Digital que las feministas habían atentado contra su vida y afirmó que Vox es el único que coloca a mujeres en puestos de responsabilidad por sus “méritos”.
“Me avergüenza este feminismo radical. Es agrio, puritano y retrógrado y, además, está aburguesado porque no las vemos gritar en Irán o Arabia Saudí. Y a esto se suma el bochorno que tenemos que pasar las mujeres cuando vemos a estos lobbies gritar en Washington al lado de mujeres cubiertas con burka. Por eso no nos importan que ellas nos insulten, porque estamos en el camino de lo cierto, y damos la batalla por la libertad que nos están quitando otras mujeres”, manifestó la posible candidata de Vox para el Ayuntamiento de Madrid, aunque no se descarta que luche por el Gobierno regional y tenga enfrente precisamente a Díaz Ayuso.
La dirigente de Vox ha reiterado en numerosas ocasiones que su partido apuesta por una igualdad de género que incluya a los hombres. En referencia a la derogación de la ley , Monasterio ha sido contundente en sus palabras: “La ley de violencia de género ha sido un gran fracaso”.
«Lo que pasa es que los excesos de las leyes de género y del propio debate son cada vez mayores y se convierten en intoxicación política»
El discurso sobre el feminismo de Isabel Díaz Ayuso es similar al de la dirigente de Vox. La popular tildó al movimiento feminista de “imperialista” y no dudó en rebatir el lenguaje inclusivo. La candidata a la Comunidad de Madrid sostuvo hace unas semanas que era defensora de leyes que expresasen una igualdad real entre hombres y mujeres.
“Lo que pasa es que los excesos de las leyes de género y del propio debate son cada vez mayores y se convierten en intoxicación política y en argumento para gobernar y perpetuarse en el poder”, argumentó la candidata del PP.
Para Ayuso el problema radica en la izquierda que es la que “pervierte el lenguaje” y fractura el castellano. En este sentido, la vicepresidenta de Comunicación del PP manifestó su cansancio por este “feminismo exacerbado”.
MISMA CONCEPCIÓN DEL ABORTO
Monasterio se posicionó en contra del aborto y apoyó a Vox en la batalla de proteger “el derecho de la mujer a ser madre y a la familia natural”. Asimismo, insistió en que el PP había abandonado la concepción de “familia tradicional” y vio como un sacrilegio apoyar la técnica de la fecundación in vitro que “atenta contra la dignidad de las mujeres”.
Díaz Ayuso, por su parte, también se ha posicionado en contra del aborto en varias ocasiones y afirmó que no era “un derecho de la mujer”. La candidata popular se mostró preocupada por los apoyos en sectores de la sociedad española ante la interrupción voluntaria del embarazo: “No criminalizo a nadie, pero un porcentaje muy alto son inmigrantes o mujeres sin recursos que lo hacen por segunda vez o tercera vez. El problema más importante de España es la baja natalidad”, dijo Díaz Ayuso.