La vida de María Dolores de Cospedal alejada de la política

María Dolores de Cospedal se alejó de la política a finales de 2018 tras más de una década en la primera plana. Fue presidenta del Partido Popular en Castilla-La Mancha durante 12 años (2006 – 2018); secretaria general del Partido Popular entre 2008 y 2018; presidenta de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha entre 2011 y 2015; y ministra de Defensa del Gobierno de España durante dos años (2016 – 2018).

Tras haber tenido puestos de gran responsabilidad optó a la presidencia del Partido Popular, buscando convertirse en la sucesora de Mariano Rajoy. Sin embargo, en las primeras resultó ganador el actual líder de la formación, Pablo Casado.

Tras este resultado, Cospedal estaba dispuesta a seguir colaborando con el partido, pero la filtración de una reunión suya con el excomisario José Manuel Villarejo en relación con el caso Gürtel aceleró el fin de su carrera política. Tras ello decidió recuperar su puesto como abogada del Estado, tratando de alejarse lo máximo posible del foco mediático.

Nacida en Madrid, se crió y pasó su infancia y juventud en Albacete, trasladándose a los 18 años a Madrid para estudiar en la Universidad CEU San Pablo, donde se licenció en Derecho.

APOYO FAMILIAR PARA DOLORES DE COSPEDAL

Durante todo este tiempo, la expolítica ha contado con el firme apoyo de su familia. La madrileña de 54 años, es madre de un niño llamado Ricardo que tuvo estando soltera en el año 2007. Dos años más tarde contrajo matrimonio con el empresario Ignacio López del Hierro, 19 años mayor que ella. Se trata de un matrimonio que está muy unido y discreto, y que trata de estar alejado de la vida pública.

El marido de María Dolores de Cospedal también tiene su pasado político. De hecho fue político antes de empresario. Ignacio, de 71 años, es hijo de un teniente coronel de Caballería, el pequeño de ocho hermanos. Natural de Sevilla, estudió en Madrid la carrera de Económicas, siendo en la capital donde dio unos primeros pasos en el Partido Liberal Demócrata para después formar parte de UCD, el partido liderado por Adolfo Suárez.

En 1977, cuando tenía 29 años, se convirtió en gobernador civil de Toledo, siendo el más joven en la historia de España. Luego ocupó el mismo cargo en Sevilla. En el primero estuvo durante dos años, mientras que en el segundo tan solo estuvo durante cuatro meses.

Antes de contraer matrimonio con María Dolores de Cospedal estuvo casado con Inés D’Aubarede Payak, la madre de sus tres hijos: Helena, Ignacio y Rodrigo. Su hija es conservadora en el Museo del Traje, mientras que su hijo mayor Rodrigo vive y trabaja en México.

Antes de conocer a la exministra se labró una larga trayectoria en el mundo empresarial, ostentando 40 cargos en diferentes empresas. Sin embargo, en la actualidad está centrado en la gestión de Hilo de Inversiones SL, sociedad que creó en 2000 y que tiene un patrimonio superior a los 4 millones de euros.

SE CONOCIERON EN ESTRASBURGO

La política y López del Hierro se conocieron en Estrasburgo. Allí fue destinada Cospedal tras recuperar su puesto como abogada del Estado tras la derrota en las elecciones del Partido Popular en marzo de 2004.

A partir de ese momento se hicieron amigos y su relación fue intensificándose hasta que se convirtió en algo más, una relación que llevaron con una gran discreción. De hecho, incluso su unión matrimonial se celebró en una estricta intimidad.

Con anterioridad, Dolores de Cospedal estuvo casada en primeras nupcias con José Félix Valdivieso González Bravo de Laguna, un compañero de oposición que era miembro de la aristocracia canaria. Sin embargo, la relación no funcionó.

María Dolores de Cospedal vive alejada de la política
María Dolores de Cospedal fue presidenta del Partido Popular en Castilla-La Mancha durante 12 años, secretaria general de la formación durante una década y ministra de Defensa dos años.

VENTA DE SU VIVIENDA EN TOLEDO

Los tres residieron durante años en el Cigarral de la Ermita, una casa que la pareja compró en 2011 y que se encuentra situada a las afueras de Toledo a través de Hilo de Inversiones, la sociedad que administra su marido.

El Cigarral de la Ermita llegó a ser el punto neurálgico de las reuniones del Partido Popular. En él tenían lugar cenas a las que acudían jueces, políticos, banqueros y empresarios, siempre bajo la vigilancia policial.

La vivienda toledana, que cuenta con una parcela que supera los 12.000 metros cuadrados, está actualmente en venta. La expolítica ya intentó deshacerse de la casa en el año 2012, cuando salió al mercado por 2,3 millones de euros. Ahora ha vuelto a tratar de buscarle salida con una rebaja sustancial, por 1,7 millones de euros.

El chalet tiene 600 metros cuadrados que se encuentran distribuidos en cuatro plantas, con cinco habitaciones, tres baños, un amplio salón y una gran cocina. En su exterior tiene un gran porche, piscina y un amplio jardín. La agencia encargada de comercializar la vivienda es Berkshire Hathaway Larvia, la inmobiliaria del multimillonario Warren Buffet.

Con su venta la familia abandona de forma definitiva Toledo para residir en su gran piso de 240 metros cuadrados situado en el barrio de Salamanca, en la capital de España.

MARÍA DOLORES DE COSPEDAL FICHA POR UN DESPACHO DE ABOGADOS

Una de las principales razones que han motivado a la exministra a tomar la decisión de vender su vivienda del cigarral La Ermita es su reciente fichaje por un despacho de abogados. En concreto Cospedal se encarga desde el pasado mes de enero de dirigir un equipo dedicado al derecho procesal y mercantil en el bufete CMS Albiñana & Suárez de Lezo.

Tras reingresar en la abogacía del Estado, donde estuvo cerca de un año, se planteó entrar en la carrera judicial y optar a la magistratura. Sin embargo, ha recibido una gran cantidad de ofertas del sector privado, decidiendo finalmente aceptar la propuesta del mencionado despacho.

La expolítica tiene su vida en Madrid, donde ahora también estudia su hijo. Por ello, ambas circunstancias han propiciado que se hayan decidido a vender su residencia de Toledo y continuar con su vida en la capital.

Por otro lado, la familia cuenta con una propiedad en la popular urbanización de Guadalmina, en Marbella. Por ello Cospedal y su marido son asiduos a disfrutar de las vacaciones de verano en la Costa del Sol, sobre todo después de que puedan relajarse al no tener que hacer frente a sus obligaciones políticas.