Soros, el creador del coronavirus y otras locas conspiranoias de la pandemia

  • La revista Nature ha asegurado que el coronavirus es el resultado de la evolución natural.
  • Los medios rusos apuntan a que George Soros y Bill Gates crearon el virus.
  • El Departamento de Estado de EE UU ya ha advertido de que Rusia quiere desestabilizar.
  • A pesar de que la revista Nature, una de las más prestigiosas, publicó un estudio que aclaraba que el coronavirus es el resultado de la evolución natural, las dimensiones de la pandemia han hecho que los bulos y las conspiranoias se extiendan de forma abrumadora. Una de las teorías que más ha circulado es la que señala al magnate multimillonario, George Soros, como el creador del coronavirus para desestabilizar la economía de China, en guerra comercial con Estados Unidos meses antes de que se propagara el patógeno por medio mundo.

    Un grupo de investigadores del Instituto Scipps de Investigación aseguró en Nature que la composición genética del virus apuntaba a que el patógeno no era el resultado de la mezcla de virus conocidos, única forma de crear un virus de esas características en un laboratorio. El coronavirus tiene demasiado en común con los patógenos de los pangolines, además de similitudes con otros que portan algunas especies de murciélagos. Pero estos artículos son más aburridos que aquellos que apuntan a teorías más propias de Hollywood.

    Una de ellas apunta directamente a George Soros, un magnate estadounidense que se ha ganado gran fama en todos los portales conspiranoicos. Este millonario es considerado por algunos expertos, como el profesor universitario Juan Antonio de Castro, como un agente del caos que se ha dedicado a lo largo de su vida profesional a desestabilizar países a través de su ONG Open Society Foundations. Son muchos los libros que apuntan a que Soros se ha lucrado lanzando bombas financieras e ideológicas al seno de muchas naciones. De hecho, uno de sus hitos más conocidos fue ganar millones tumbando la libra esterlina. Sin embargo, esa fama y ese recorrido le han valido ahora un puesto de prestigio en el mundo de las conspiranoias.

    Son demasiados los focos conspiranoicos que apuntan a Estados Unidos como creador del coronavirus. En un principio, muchos analistas consideraron que el estallido de la pandemia en China perjudicaría al país asiático, que estaba en guerra comercial contra EE UU. Pero hay algunos medios de comunicación rusos que van más lejos y consideran que Donald Trump, la CIA o cualquiera que estuviera sentado en un puesto de poder en el país americano contactaron con George Soros para que éste pusiera a su servicio sus laboratorios para elaborar el coronavirus.

    Sputnik o NewsFront han sido de los primeros en dar parte de ello. Estos llegan incluso a dar detalles sobre la conspiración y dicen que Soros eligió la dirección Gaoxin 666 para desarrollar la pandemia.

    También el fundador de Microsoft tiene parte de culpa, según apuntan algunos medios. No hay que olvidar que Bill Gates ya había pronosticado que el mundo globalizado no estaba preparado para una pandemia. Y esta predicción le ha salido demasiado cara, puesto que ahora está en el ojo del huracán de todos los medios conspiranoicos que buscan un culpable de la pandemia. Esto se vio más acentuado cuando se supo que había organizado unos ejercicios en Microsoft denominados Evento 201 en el que preparaba a sus empleados para una pandemia que acabaría con 65 millones de personas en 18 meses.

    El Departamento de Estado de Estados Unidos cree que el aparato mediático ruso se ha puesto en marcha para, una vez más, desestabilizar toda la alianza occidental. Y para ello, han encontrado en Soros y en Bill Gates los culpables por antonomasia, según detallan desde los servicios de EE UU.

    Soros no es ningún objetivo nuevo. De hecho, sus lazos con revueltas de color, con asociaciones que han contribuido a desestabilizar políticamente algunos países y su hito con la libra no juegan a su favor. Pero aceptar una teoría tan extendida como que el coronavirus fue elaborado al detalle en un laboratorio significa tumbar las consideraciones de la revista Nature, la cual cada vez está más cerca de determinar que la pandemia es el resultado de la evolución natural de un patógeno que afecta animales, como casi todos los virus que han generado las últimas pandemias, incluido el sida.

    Esta teoría también pasa por otra realidad: que Soros ya dispone al mismo tiempo de la vacuna que tanto ansía el mundo. Algo un poco contraproducente para Estados Unidos, país que está destinando miles de millones para buscar un tratamiento y una cura para este patógeno que salió de una ciudad china llamada Wuhan.