El 15 de llegó a Netflix ‘White Lines’, una serie que viene avalada nada menos que por el creador de ‘La casa de papel’ Álex Pina. Es un factor de éxito seguro, quizá por eso tampoco se le hizo mucha promoción o bien que no se esperar mucho de este serie. Pero vale la pena engancharse y te mostramos por qué tienes que ver ‘White Lines’ y por qué crea adicción.
El origen del proyecto
La semilla del proyecto llegó nada menos que de la mano del uno de los productores de ‘The Crown’, Andy Harries. El británico es un enamorado de Ibiza, donde se ubica la trama de ‘White Lines’, y quería hacer una serie ambientada en la isla balear.
Le había encantado ‘Vis a Vis‘ y ‘La casa de papel’, por lo que tuvo claro encargar a Álex Pina y a su equipo de Vancouver Media la creación de la nueva serie. Al final la serie es un híbrido colaborativo entre la parte británica (caso todo el equipo técnico) y la española (varios actores, localización), y también argumentalmente te adelantamos que están ambas versiones.
