sábado, 4 mayo 2024

La moción de censura se aleja de la Comunidad de Madrid ante una Ayuso cuestionada

  • Ignacio Aguado ve con buenos ojos romper su relación con Isabel Díaz Ayuso si eso le acerca a Ángel Gabilondo.
  • El miedo de Ciudadanos es que haya un adelanto electoral y pierdan representación.
  • La relación entre Ciudadanos y el PP en Madrid está más rota que nunca a raíz de la crisis del coronavirus.
  • Que el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, y la presidenta, Isabel Díaz Ayuso, tienen una relación cada vez más tensa es un secreto a voces en la administración autonómica. La gestión de la crisis del coronavirus de Díaz Ayuso ha sido muy criticada por la oposición y por el Gobierno central. Tanto, que incluso la idea de adelantar las elecciones autonómicas se ha tanteado. Sin embargo, Aguado ha salido al paso y ha desmentido lo que hace días todos daban por seguro: que se fuera a realizar una moción de censura y que se hubiera acercado al PSOE de Ángel Gabilondo.

    Aguado ha sido apartado del gabinete que ha gestionado la crisis del coronavirus en la Comunidad de Madrid. E incluso además de estar en un segundo plano, ha recibido críticas de sus propios socios de gobierno por determinadas gestiones que corresponden a Ciudadanos, ya sea el Metro de Madrid o las residencias, tan golpeadas por el coronavirus. Todo esto ha hecho que Aguado se dejara querer por otras alternativas y no hubiera descartado ningún escenario, incluido el que contemplaba un adelanto electoral que podría desbancar a Díaz Ayuso de la presidencia. Sin embargo, ante la bola de nieve que se había formado, Aguad ha desmentido que esto fuera a tener lugar.»No va a haber moción de censura ni elecciones anticipadas», ha detallado el vicepresidente.

    El PP gobierna y quiere seguir así. Y como la potestad de convocar un adelanto electoral corresponde única y exclusivamente al presidente (o presidenta, en este caso), todo parece indicar que si Aguado no aprieta más la tuerca, no habrá elecciones. 

    [td_block_11 custom_title=»» separator=»» post_ids=»102871″ limit=»1″ css=».vc_custom_1496993590403{border-top-width: 1px !important;border-right-width: 1px !important;border-bottom-width: 1px !important;border-left-width: 1px !important;padding-top: 5px !important;padding-right: 5px !important;padding-bottom: 5px !important;padding-left: 5px !important;border-left-color: #000000 !important;border-left-style: solid !important;border-right-color: #000000 !important;border-right-style: solid !important;border-top-color: #000000 !important;border-top-style: solid !important;border-bottom-color: #000000 !important;border-bottom-style: solid !important;border-radius: 4px !important;}» tdc_css=»»]

    No hay que olvidar que el PP consiguió conservar la presidencia de la Comunidad de Madrid a duras penas. Fueron los 30 votos de su grupo parlamentario, más los 26 de Ciudadanos y los 12 de Vox los que dieron a los populares la presidencia. Pero no hay que olvidar que al otro lado había 64 votos en contra que sí que veían con buenos ojos que Gabilondo fuera el presidente. Y si se mantuvieran esos resultados, el cambio de criterio de Aguado daría un giro importante a la política de la autonomía de la capital. 

    El vicepresidente de la Comunidad de Madrid se ha convertido en un cero a la izquierda en la administración. El PP le ha apartado de todas las decisiones relevantes y esto ha ahondado en la mala relación que mantienen los dos partidos en la Comunidad. Esto ha hecho que Ciudadanos se planteara, al igual que ha hecho en el Congreso, levantar el veto contra el PSOE y abrirse a convertirse en un partido de centro, alejado de Vox y con un talante más progresista.

    Ahora bien, el único dato que tira para atrás a Ciudadanos es que ninguna encuesta les da un resultado parecido al actual, por lo que intentar tumbar al PP para levantar un nuevo ejecutivo autonómico de la mano de Gabilondo puede enterrar aún más a Ciudadanos y convertirles en un partido residual. No hay ningún sondeo que dé más escaños a Ciudadanos. Todos apuntan a que el partido sigue la tendencia a la baja, y eso podría suponer la ruina de Aguado.

    Aún así, hasta la propia presidenta de la Comunidad de Madrid es consciente de que Aguado está jugando a dos bandas. E incluso parte de su entorno se ha lanzado a asegurar que el plan que tendría Ciudadanos sobre la mesa puede convertirse en un tiro en el pie del partido naranja. Al mismo tiempo, mientras Ciudadanos quiere acercarse a Gabilondo, el PP parece haber encontrado una buena relación con Vox.