jueves, 12 diciembre 2024

Álvarez de Toledo acusa a Calvo de insinuar que PP apoya «un golpe de Estado»

La portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Cayetana Álvarez de Toledo, ha acusado este miércoles a la vicepresidenta Carmen Calvo de «insinuar que el PP apoya un golpe de Estado» y lo ha achacado a que el Gobierno está inmerso en «una vulgar operación de camuflaje fruto de una desesperación terminal» por su «letal» gestión en la crisis de coronavirus.

La ‘número dos’ del Ejecutivo ha respondido que los cargos públicos tienen «una obligación con la verdad» y ha invitado a la dirigente de PP a sentarse a tomar un café juntas tras su pregunta «enciclopédica» en el Pleno de la Cámara Baja. «Tómese un café conmigo, con un par de horas por delante, acéptelo», le ha dicho.

ÁLVAREZ DE TOLEDO: EL OTRO VIRUS DE «LA MENTIRA»

En la sesión de control al Gobierno en el Congreso, Álvarez de Toledo ha criticado duramente que Calvo espetara a Pablo Casado hace una semana «en qué anda», vertiendo «tóxicas insinuaciones sobre la implicación del PP en una presunta conspiración para derrocar al Gobierno».

«O se atreve a afirmar que el PP está implicado en un golpe de Estado y lo demuestra; o admite con lógico rubor en la cara, la verdad. Diga ante esta Cámara la verdad: ese fantasmagórico golpe de Estado es un maligno bulo cuyo único propósito es camuflar la responsabilidad del Gobierno en la muerte de miles y miles de españoles», ha enfatizado.

En este sentido, ha reiterado que el Gobierno está inmerso en una «vulgar operación de camuflaje fruto de una desesperación terminal». Así, ha dicho que, para «tapar su letal gestión del virus» en los tribunales, el Ejecutivo está «diseñando otro virus»: «la mentira de una España condenada al guerracivilismo y la involución.

De hecho, ha subrayado que ese «bulo» ha alcanzando tales proporciones que la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha tenido que «ratificar el compromiso de las Fuerzas Armadas con la Constitución», algo que, a su entender, es una «ofensa» a la dignidad de los militares y agentes y a la inteligencia de los españoles. «Aunque con sus insidias, más que degradarnos a los demás, se degradan a sí mismo», ha apostillado.

EL GOBIERNO «ANDA CONSINTIENDO A LOS GOLPISTAS»

Además, Álvarez de Toledo ha recriminado al Gobierno que haya apartado al «leal» coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos y haya «auxiliado» al mayor de los Mossos Josep Lluís Trapero –tras rebajar la Fiscalía su pena de rebelión a sedición– con el «uso inmoral» de la Fiscalía. Además, ha señalado que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, no debería seguir al frente de su Departamento.

Por eso, ha asegurado que la «pregunta» no es en qué anda el PP sino en qué anda el Gobierno y ha añadido que es «en lo mismo que hizo presidente a Sánchez y con los mismos». «Andan legitimando y consintiendo a los golpistas, ellos sí, mientras ultrajan a los demócratas. En eso andan y de eso cojean», le ha espetado.

CALVO DEFIENDE A MARLASKA

Calvo ha afeado a Álvarez de Toledo que se dirija de manera «directa y personal» a Grande-Marlaska y le ha recalcado que está sentado en el Consejo de Ministros porque el presidente «legítimo y constitucional de España», Pedro Sánchez, es quien nombra y cesa ministros.

La vicepresidenta, que se ha ceñido a la pregunta que figuraba en el orden del día sobre la verdad, ha afirmado que los cargos públicos tienen «una obligación con la verdad». Además, ha recordado la película ‘Por qué lo llaman amor cuando quieren decir sexo’ y ha dicho a la dirigente del PP que lo único que hace cada día es «manifestar sus verdades y su posición ideológica», así como su «estrategia».

«¿Por qué enreda constantemente con especie de autoproclamada superioridad moral y ética en la política? Este es el verdadero problema», ha proclamado, para resaltar que en democracia y en un Estado de Derecho «la única verdad incontestable es el cumplimiento de las leyes».

Carmen Calvo ha afirmado que la portavoz del Grupo Popular le ha hecho una pregunta «enciclopédica» desde el punto de vista «filosófico, jurídico y político» y la ha animado a sentarse juntas a tomar un café. «Tómese un café conmigo, con un par de horas por delante, acéptelo», ha concluido.