viernes, 13 diciembre 2024

El miedo a ir a hospitales es uno de los retos de los directivos de la salud

El miedo de los pacientes a ir a los hospitales y centros sanitarios, profesionales sanitarios «cansados y desgastados», la necesidad de gestionar nuevos liderazgos surgidos durante la crisis sanitaria y de reubicar las prioridades son solo algunos de los retos a los que se están enfrentando los Directivos de la Salud en el camino de vuelta a la normalidad asistencial, según han puesto de manifiesto durante el primer encuentro digital ‘El Café de la Vuelta. Análisis y propuestas para la vuelta a la normalidad en el sector sanitario’, celebrado por la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA), con la colaboración de Johnson & Johnson.

«El regreso a la actividad quirúrgica no COVID-19, la gestión de equipos, la compra pública post COVID-19 y la implementación de la telemedicina como una oportunidad tras la pandemia, son algunos de los temas que los Directivos de la Salud tienen encima de la mesa para poder gestionar la vuelta a la normalidad asistencial con calidad y de la forma más eficiente», explica el presidente de SEDISA y Fundación SEDISA, Joaquín Estévez Lucas.

Entre los retos a los que los Directivos de la Salud deben enfrentarse se encuentra la gestión de equipos, tema que ha planteado a los participantes el director de Medical and Government Affairs en España de Johnson & Johnson, Manuel Vilches, quien ha destacado que «el Directivo de la Salud debe facilitar el funcionamiento de los procesos asistenciales y que se cumplen los objetivos de la Organización Sanitaria, ante lo que la pandemia ha supuesto problemas, pero también oportunidades».

Según el director gerente del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, José Soto, «la gestión de los equipos plantea en la actualidad tres grandes retos: la aparición de nuevos liderazgos, que hay que orientar y cuyos roles debemos clarificar, la formación y hacer posible que los profesionales descansen para poder continuar su labor».

Para ello, es necesario implementar algunas estrategias, como la cultura del ‘No Hacer’, focalizarnos en la gestión por procesos e instaurar la gestión clínica 3.0, es decir, la integración de todos los servicios asistenciales, tanto hospitalarios como extrahospitalarios, y establecer un cambio de concepción de lo sociosanitario, integrado en el ámbito asistencial», añade.

Del mismo modo, el gerente del Hospital Universitari Vall d’Hebron de Barcelona, Albert Salazar, hace hincapié en que «aprovechar esta situación en la transformación del modelo de gestión, que pasa por reordenar los servicios por áreas de conocimiento, avanzando a un modelo más funcional donde destaque el papel clave de la Enfermería».

Respecto a la restauración de la actividad quirúrgica, si bien los hospitales, en general, han recuperado la normalidad en torno al 70 por ciento, dependiendo de cada hospital, áreas, etc.-, el tiempo en el que la atención hospitalaria se ha focalizado en el Covid-19 está conllevando reajustes en esta actividad, siendo necesario priorizar en los casos más urgentes y graves.

«No solo debemos fijarnos en la situación actual, sino en lo que nos va a llegar a medio plazo. A modo de ejemplo, el hecho de haber tenido que paralizar los programas de cribado conllevará un aumento de cirugía oncológica», explica Luis Verde, gerente del Área Sanitaria de A Coruña. «Debemos tener en cuenta numerosos factores y quizá es el momento de priorizar la gestión de la lista de espera en función de las necesidades de los pacientes y no solo de la disminución de esta», agrega.

Junto a este hecho, según el director gerente del Hospital Universitario Virgen de la Victoria de Málaga, José Antonio Medina, «destaca también el hecho de que un porcentaje de casos que se están interviniendo quirúrgicamente en la actualidad son casos con patologías muy avanzadas, dado que se están gestionando tiempo después del debido a consecuencia de la pandemia».