Sexo en La Casa Fuerte y otros realities: cuando las cámaras no importan

La Casa Fuerte nació con la premisa de mantener todo lo posible las audiencias de Supervivientes durante el verano hasta la nueva edición de los próximos programas de telerrealidad de septiembre y octubre. Por supuesto, las broncas están aseguradas. Y como bien se sabe, del odio al amor, hay una delgada línea que siempre ayuda a liberar la tensión (sexual) acumulada. Oriana Marzoli e Iván González, y Fani y Chrístopher ya saben a qué sabe el sexo en La Casa Fuerte. También Ferre y Cristina.

El edredoning se inventó como término coloquial en las primeras ediciones de Gran Hermano, cuando los primeros concursantes se metían debajo del edredón y las sábanas para evitar que las cámaras les captaran en esos momentos tan íntimos. Desde entonces, las escenas sexuales en los realities se muestran cada vez más abiertamente y cada vez más explícitas, sin importar la presencia de las cámaras.

FERRE Y CRISTINA, SOLUCIONANDO LAS DISCUSIONES CON UNA SESIÓN DE EDREDONING

No son los primeros en estrenar los sonidos de muelles y roces del edredón que dieron nombre al acto de tener relaciones frente a la cámara, pero sí los últimos. Con en las parejas anteriores, el desencadenante fue una fuerte discusión en la que parecía incluso que Cristina iba a abandonar el show. Todo porque Ferre se animó con la exigencia de Sabater de tener un baile privado de los chicos de la casa. Después de los gritos de él en la paellada de la prueba, fue ella quien mostró también su carácter. Al final, la reconciliación tuvo final feliz bajo el edredón.

Ferre y Cristina La Casa Fuerte sexo