El diputado de ERC en el Parlament Ferran Civit (diputado de JxSí en la anterior legislatura) ha confirmado en el juicio a exmiembros de la Mesa en el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) que el 27 de octubre de 2017 votaron para hacer «efectiva» la independencia y que los pronunciamientos del Tribunal Constitucional no condicionaron su voto.
Civit ha comparecido a petición del abogado de la exdiputada de la CUP Mireia Boya, juzgada por presunta desobediencia junto a Lluís Corominas, Ramona Barrufet, Lluís Guinó (JxSí) y Anna Simó (ERC), y a preguntas del letrado ha asegurado que cuando se presentan iniciativas, como lo fueron las propuestas de resolución que se votaron ese 27 de octubre, es para «hacer política y no poesía».
Ha asegurado que los pronunciamientos del TC no condicionaron su voto: «Es lógico que el TC considerara que la independencia de Cataluña es anticonstitucional, pero estoy seguro que un día u otro lo acabará reconociendo como un hecho».
A petición del abogado de Boya, Carles López, también ha comparecido el exdiputado de SíQueEsPot Albano Dante-Fachin, que ha confirmado que su grupo votó las propuestas de resolución sobre la independencia, y ha calificado de «perfectamente fundamentado» que se votaran de forma secreta ante las consecuencias jurídicas que han tenido algunos parlamentarios.
«No era excesivo tener precaución ante una Justicia donde tenemos al Rey de España, que es un corrupto, presidiendo esta sala», ha dicho, a lo que el presidente de la Sala, Jesús María Barrientos, le ha interrumpido y le ha avisado de que no le permitiría estos comentarios ajenos al contenido del juicio.