El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha pedido este lunes al delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco, que no se haga «el indignado» con lo ocurrido ayer en la manifestación de Colón contra el uso de las mascarillas, ya que es él quien tiene «las competencias para evitarla».
«Parece razonable pensar que en una concentración que pide no usar mascarillas, no llevarán mascarillas en esa concentración. Lo que uno no puede hacer es trampas al solitario. La delegación no puede mostrar su indignación teniendo competencias para tratar de evitar lo que se produjo«, ha expresado durante su visita a las obras de remodelación del parque urbano plaza de Nueva Orleans, en el distrito de Ciudad Lineal.
Por su parte, José Manuel Franco ha asegurado este lunes que se sancionará «con la máxima dureza» permitida por la ley el incumplimiento del uso de la mascarilla en la concentración de críticos con las medidas de protección frente a la pandemia celebrada ayer en la capital.
Almeida asegura que «si se produjeron infracciones hay que perseguirlas» pero ha pedido al delegado del Gobierno «que no se haga el indignado» ahora, ya que «cuando se convoca una concentración contra el uso de mascarillas se entiende que no las llevan.
En este punto ha recordado que la Delegación del Gobierno «es la competente en manifestaciones y orden público», y que pidió al Consistorio «controlar el tráfico para que no hubiera problemas en relación con la manifestación, y la Policía es lo que hizo atendiendo esta petición». «Parece ser que se han impuesto 30 sanciones; parecen pocas visto lo visto. Pero nosotros hicimos lo que se nos pidió, controlar el tráfico», ha apuntado.
Para el alcalde de Madrid la concentración de ayer fue «lamentable», ya que «pocos pueden negar la evidencia del sufrimiento inenarrable en España y Madrid como consecuencia de esta pandemia», así como el número de fallecidos. Entiende así que «negar la eficacia y utilidad de las medidas de protección es un ejercicio de irresponsabilidad total y absoluto».
«Esta batalla no ha sido vencida, no podemos decir que la hemos ganado. El número de infectados crece día tras día, aunque con carácter leve o asintomáico, pero no podemos bajar la guardia. Todos los que se manifestaron negando lo evidente, que estamos en pandemia, y que la mascarilla es necesaria, cometen una equivocación», ha señalado a continuación.
Por ello ha invitado a los manifestantes a «mirar en su entorno más próximo, familiar», donde «habrá gente que habrá sufrido las consecuencias de esta enfermedad, y que se pregunten si de verdad no llevar mascarilla o no adoptar medidas de precaución es el mejor mensaje».