La comunidad autónoma de Extremadura mantiene en estos momentos 71 brotes de Covid-19 activos, que aglutinan a 906 casos positivos y a 3.069 contactos, y ninguno de los cuales se sitúa en centros residenciales.
Así, en Extremadura se han llegado a declarar 87 brotes en el total del periodo, de los que 16 ya han sido cerrados y los otros 71 «en su inmensa mayoría están acotados y algunos de ellos en franca regresión y en los próximos días podrán ser también cerrados», según ha desgranado en rueda de prensa este jueves en Mérida el vicepresidente segundo y consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles.
De igual modo, se encuentran en situación de aislamiento social y de regreso a la Fase 2 un total de cinco brotes que afectan a seis localidades extremeñas (Alcántara, Alía, Villarta de los Montes, Valencia de las Torres que forma brote junto a la localidad de Llera que se confinó ayer; y a la finca La Barquilla perteneciente a la localidad de Barquilla de Pinares).
En este sentido, la Junta de Extremadura solicitará este jueves la autorización judicial para aplicar una segunda prórroga de la fase de aislamiento y regreso a Fase 2 para Villarta de los Montes, porque si bien si bien se va reduciendo «de forma importante» el número de personas infectadas dentro del brote en dicha localidad, «todavía la incidencia es lo suficientemente alta como para el menos durante 7 u 8 días siga manteniendo el aislamiento social y la Fase 2», ha explicado Vergeles.
Además, la Junta ha solicitado este jueves la autorización judicial para la primera prórroga –por un periodo de alrededor 14 días– para el aislamiento social y la Fase 2 en la Finca La Barquilla, porque «aunque es verdad que van disminuyendo también los casos activos sigue teniendo una incidencia importante».
SIN BROTES EN CENTROS RESIDENCIALES
Por otra parte, el consejero de Sanidad ha destacado que «no hay» ningún brote de Covid-19 en este momento en centros residenciales de Extremadura, algo que según ha dicho «no es por casualidad» sino que obedece al plan de contingencia diseñado por la Junta.
Dicho plan, según ha recalcado, ha permitido entre otras cuestiones que en este periodo de ‘nueva normalidad’ hayan sido detectados 16 trabajadores positivos por Covid-19 que iban a empezar a trabajar en centros residenciales y que «antes de empezar a trabajar han sido apartados».
En este sentido, Vergeles ha añadido que el SES va a continuar realizando pruebas PCR a todos los trabajadores que se incorporen a centros residenciales por primera vez a los mismos o por regreso de trabajadores habituales de sus vacaciones, porque «los centros residenciales tienen una población muy vulnerable y por tanto todas las medidas son pocas».
Al mismo tiempo, ha recordado que en el periodo de ‘nueva normalidad’ «sólo» se detectó un brote en el CAM de Alcuéscar con un residente, en un centro que según ha apuntado no pertenece a gestión de la Junta sino del IMSERSO, aunque está siendo seguido desde Salud Pública de Extremadura.
Dicho residente en este momento está ingresado en un hospital y no hay nadie por tanto en dicho centro infectado.