sábado, 14 diciembre 2024

El exnúmero dos de Interior apuntó que si declaraba en Kitchen también lo haría Rajoy

La Fiscalía Anticorrupción cuenta con varios SMS y notas sustraídas del teléfono de Francisco Martínez, exsecretario de Estado de Seguridad, hablando sobre la operación Kitchen, incluyendo un mensaje aportado en una comparecencia en sede judicial por el comisario Enrique García Castaño en el que señala que este exalto cargo del Ministerio del Interior en la época del PP sostuvo en un mensaje que su imputación conllevaría «probablemente» la citación en los tribunales del expresidente del Gobierno Mariano Rajoy.

Así consta en el informe, en el que los fiscales del ‘caso Villarejo’ piden la imputación del entonces ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, por tener un «conocimiento en detalle» de la operación Kitchen para sustraer documentación comprometida del extesorero del PP Luis Bárcenas. El escrito sirvió también para citar a la exsecretaria general del PP María Dolores de Cospedal y su marido, el empresario Ignacio López del Hierro.

En diversas conversaciones judicializadas, Francisco Martínez –que también está imputado en la pieza 7 del ‘caso Villarejo’, la conocida como operación Kitchen– corrobora esta idea al apuntar a la responsabilidad de su superior inmediato en Interior, Jorge Fernández Díaz, de Cospedal o incluso del entonces presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Los fiscales hablan operación «parapolicial» por iniciativa de «altos representantes del Partido Popular».

De Rajoy se habla en el informe de la Fiscalía en un mensaje atribuido a Francisco Martínez que aporta en una declaración en sede judicial el 9 de marzo de 2020 el comisario de Policía Enrique García Castaño, y que obtuvo por mediación de su colaborador Silverio Nieto. Los fiscales apuntan, no obstante, que del número de teléfono que recibe este mensaje atribuido al que era el número dos de Interior no quedó constancia en el acta judicial de aquella declaración, ni tampoco de la fecha del mensaje.

En concreto, en ese texto atribuido a Martínez –en el que puso en con copia a Fernández Díaz– se alude a las «instrucciones muy claras y explícitas sobre los supuestos operativos policiales», sosteniendo que para él su «legalidad siempre le pareció clarísima», y añade que de revelar esto «necesariamente conllevaría la citación de Jorge y probablemente de Rajoy». «Desde luego nada más lejos de mi deseo», subraya.

«RECIBÍ INSTRUCCIONES MUY CONCRETAS»

El propio Martínez, que buscó una «estrategia común» con García Castaño, recoge en una nota de su teléfono móvil con fecha de 13 de octubre de 2019 otro apunte sobre la operación Kitchen: «El asunto que investiga la AN (Audiencia Nacional) no fue iniciativa mía, sino todo lo contrario. Recibí instrucciones muy concretas». «Escuché muchas veces de mi superior que era el asunto más importante que teníamos entre manos… Y todo eso lo puedo demostrar».

«Lo que nadie puede pretender es que sea una especia de mártir de una causa que no era la mía, que nunca lo fue, y en la que me vi involucrado exclusivamente por lealtad y obediencia», continúa Martínez, que en otra conversación señala que Fernández Díaz fue «el origen de todos los líos».

Martínez muestra su indignación tanto por las declaraciones de Jorge Fernández Díaz desvinculándose del operativo para sustraer documentación a Bárcenas como de las declaraciones ante el juez y los fiscales de Enrique García Castaño, un veterano agente de la Policía Nacional también relacionado con la trama del excomisario José Manuel Villarejo.

COMPARECENCIA ANTE NOTARIO

Molesto con las noticias de la operación Kitchen que le implicaban con la trama presuntamente corrupta, Francisco Martínez compareció el 13 de junio de 2019 ante un notario para entregar varios mensajes SMS en los que Fernández Díaz le reportó novedades en la etapa de ambos en Interior. «Chófer. B: Sergio Rios Esgueva (ahora hace esa función con su mujer)», es el primero de los SMS, de fecha 13 de julio de 2013.

Le siguen otros SMS rescatados del móvil de Francisco Martínez, cuyo remitente es el exministro Fernández Díaz: «Es importante». Y una tercera donde se habla del «contacto Cecilio» del que le hablará el extitular del Interior tras un Consejo de Ministros. «Ok. Espero tu llamada después del Consejo», le responde el número dos del Ministerio del Interior en 2013.

El día 17 de octubre hay un nuevo mensaje presentado ante notario, y ahora en poder de la Fiscalía –que intervino el móvil en un registro–, en el que Jorge Fernández Díaz le dice a Francisco Martínez: «La operación se hizo con éxito: Se ha volcado todo (2 iPhone y 1 iPad). Mañana tendremos el informe. Según el informador (veremos si es así), ese material lo había dado B a los abogados para poder obtener a través de ellos los teléfonos y otros datos de su agenda (…) Otra cosa es que nosotros con el volcado efectuado podamos acceder a una gran e interesante información… veremos. Te informo».

La Fiscalía analiza estos mensajes y sostiene que se refieren al seguimiento con fondos reservados que se hizo gracias a Sergío Ríos Esgueva, el chófer de la familia Bárcenas captado como informador en la operación Kitchen. Se recogen numerosas conversaciones en pleno operativo al margen de los legalmente abiertos en sede judicial donde, entre otras cuestiones, Francisco Martínez y García Castaño tratan sobre el dinero que guarda el extesorero del PP en las Antillas Holandesas y Cracovia.

En sus conversaciones en posesión de la Fiscalía, Francisco Martínez se queja de la «poca vergüenza» del que fue su jefe en Interior, Fernández Díaz, por desvincularse de Kitchen. De ello deja constancia en el apartado Notas de su teléfono el exsecretario de Estado de Seguridad con un largo escrito donde se queja que «nadie» del PP se ha puesto en contacto con él y en el que alude incluso al actual ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska.

«Es importante que el Gobierno no desclasifique nada más», dice Martínez en esta nota de fecha 13 de octubre de 2019, «Marlaska ha generado un gran daño mediante una desclasificación masiva de documentos para montar un ‘escándalo político».

Alude a la relación con el juez del caso del ministro que relevó a Fernández Díaz en Interior, Juan Ignacio Zoido (PP), e insiste en una idea básica: «Lo que deben tener claro es que yo pediré autorización para hablar de todo y tengo muy claro que en el asunto que nos ocupa hubo otros servicios que intervinieron». En su conversaciones sostiene que si él se ve perjudicado por Kitchen, su superior en Interior e incluso Mariano Rajoy también terminarán salpicados.