El exministro y exsecretario general del Partido Popular, Ángel Acebes, ha celebrado este miércoles su absolución y la del resto de acusados en el juicio por la salida a Bolsa de Bankia tras «nueve años» de «acusaciones graves, injustas y falsas».
En una entrevista en la Cadena COPE, Acebes ha lamentado el «daño reputacional» que el juicio ha provocado para él y para su familia. «A ver ahora quien lo resarce», ha apuntado, para después lamentar que el inicio de su «calvario» tuviera origen en una «acusación política».
«UPyD toma la decisión de incluirme en la querella como miembro del Consejo de Administración de Bankia cuando yo no lo era», ha continuado Acebes, que ha expresado su «desesperación» por tener que demostrar que no estaba en el «lugar y el momento» de la salida a bolsa de Bankia.
Todo el proceso ha sido, según ha reconocido, una «losa» de la que el exministro no pudo desprenderse a lo largo de nueve años. «Hoy ha desaparecido ese peso que nos atenazaba. Es una sentencia reconfortante por lo extraordinario de que me dedica 12 folios a resarcir todas las acusaciones falsas que he recibido», ha afirmado.
Con todo, su imputación supuso su salida del Consejo de Administración de Iberdrola. «Decidí dejar esa responsabilidad porque no quería causar ningún daño reputacional a Iberdrola ni a su presidente Ignacio Sánchez Galán», ha apuntado Acebes.
Por último, Acebes ha lamentado el «daño personal» generado por «este proceso». Ahora ha quedado claro de que no hubo ningún delito. La decisión fue avalada por el Banco de España, la CNMV, impulsada por el Gobierno de ese momento», ha zanjado.
Acebes se ha expresado así un día después de que la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional acordase absolver a los 34 acusados en el juicio por la salida a Bolsa de Bankia, entre ellos el expresidente de la entidad y del FMI, Rodrigo Rato, por delitos de estafa a los inversores y falsedad contable.
En la sentencia, la magistrada Ángela Murillo establece, respecto a los miembros de los comités de auditorías de BFA y Bankia –entre ellos el propio Acebes–, que «la existencia de una total ausencia del más mínimo sustento probatorio necesario para apoyar «semejante acusación» le parece «clamorosa».