El secretario general de Podemos en Castilla y León, Pablo Fernández, ha calificado como «una mierda» el informe presentado por la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades sobre la situación de las residencias durante los peores meses de la pandemia de la COVID-19 y ha pedido explicaciones sobre lo que en él se recoge.
Fernández, quien ha comparecido en la capital burgalesa ante los medios de comunicación, ha lamentado que la Junta de Castilla y León haya tardado tres meses en elaborar «semejante bodrio» que «bien podría haberlo realizado un estudiante de primero de carrera en tres días».
El secretario autonómico de Podemos ha condenado, asimismo, que el informe no recoja ningún tipo de autocrítica ni reconocimiento de posibles fallos por parte de la Administración regional.
En la misma línea, ha recriminado a la Junta que el informe no comente nada acerca de cómo impactó en los centros residenciales la carencia de medio y personal y que tampoco se aborde la cuestión del modelo residencial.
En este sentido, ha sostenido que este modelo «ha hecho aguas» y ha señalado que los datos que arroja la evolución de las infecciones son «terroríficos» y las cifras «desoladoras», con 2.700 muertos.
Finalmente, ha criticado que el documento no arroje conclusiones válidas, ni tampoco ofrezca soluciones o alternativas de futuro para saber cómo abordar la cuestión, a la vez que ha reiterado que, lo más grave, es que se miente en el documento.
Al respecto, ha asegurado que se miente en el informe cuando se asegura que en abril se hacían pruebas de detección en todas las residencias, cuando Podemos ha podido constatar que ni siquiera en mayo esto era así. «Es algo muy grave», ha añadido.