El Centro Nacional de Medicina Tropical (CNMT) del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) ha abierto una nueva línea de investigación como parte del programa de Salud Global del Instituto, denominada Nutrición, resiliencia y salud global, con el objetivo de «mejorar el estado nutricional y de salud de las personas a través de diversas intervenciones».
Según explica la investigadora Estefanía Custodio, esta iniciativa pone especial enfoque en las poblaciones vulnerables y desfavorecidas de países en desarrollo o de rentas bajas, y se centra en busca identificar y validar indicadores efectivos para medir el estado nutricional y la dieta. Y, por otro lado, trata de localizar determinantes que influyen en prácticas nutricionales inadecuadas para favorecer actuaciones con mayor impacto en la mejora de problemas de malnutrición.
Uno de los retos actuales «es la coexistencia de la malnutrición en todas sus formas, desde la desnutrición al sobrepeso y la obesidad, en una misma población, hogar o individuo», explica la experta que, además, añade que los factores externos que impactan la seguridad alimentaria (factores climáticos, de conflicto o salud) han empeorado en los últimos años, lo que hace aumentar la población que pasa hambre en el mundo.
«Para enfrentarnos a estos retos es importante la identificación de indicadores válidos, reproducibles y robustos, y la creación de modelos que integren distintas dimensiones, para poder beneficiarnos de oportunidades como las que ofrece el ‘big data’ y proponer intervenciones más efectivas y sostenibles», afirma la investigadora del CNMT.
Según informa (ISCIII), varios proyectos de investigación concretos acompañan a los objetivos generales. El primero de los objetivos incluye una iniciativa, que se desarrolla con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y el Centro de Investigación Conjunta de la Comisión Europea, para valorar las diferencias encontradas al utilizar distintos indicadores de malnutrición aguda y analizar el impacto que esto tiene en la valoración de la situación nutricional a nivel poblacional.
Este proyecto trabaja con datos de 28 países de África y Oriente Medio y se acompañará de un informe específico de UNICEF y de publicaciones científicas que expongan su desarrollo y resultados.
Un segundo proyecto vinculado al primero de los objetivos se realiza en colaboración con la Organización Mundial de la Agricultura y la Alimentación (FAO, por sus siglas en inglés), y persigue mejorar la metodología en la recogida de datos y análisis de los indicadores sobre la de diversidad de la dieta entre las mujeres.
Hay otros dos proyectos relacionados con el segundo de los objetivos de esta nueva línea de investigación en el CNMT. Uno de ellos, denominado FoodLand, trabaja con recomendaciones nutricionales para poblaciones en seis países africanos y corresponde a una investigación financiada en el programa europeo de investigación Horizonte 2020; el otro, llamado CRESCER, trata de idear y desarrollar acciones capaces de disminuir la desnutrición crónica en menores de 5 años en otro país africano, Angola.