La presunta corrupción de Jácome salpica al PP de Feijóo

  • El alcalde de Ourense está al borde del KO tras sufrir cinco dimisiones.
  • Jácome habría perdido sustanciosas mordidas para financiar su televisión local.
  • El PP de Feijóo y Baltar posibilitó que un personaje de su nivel gobernase la tercera ciudad de Galicia.
  • Que un personaje del nivel subterráneo de Gonzalo Pérez Jácome acumule 16 meses al frente de la alcaldía de Ourense demuestra lo eficaz que es su televisión local, Auria TV, que se estaría financiando con las ‘mordidas’ que exigiría el edil.

    Cinco concejales de su partido, Democracia Ourensana, le han dejado en mínimos tras evidenciarse que Jacome reclamaba hasta el 60% de los ingresos que ingresaban por su trabajo los asesores que fichaba ‘a dedo’.

    Alberto Núñez Feijóo, que dice que si él fuera Jácome «no sería un estorbo para la ciudad de Ourense», omite con arrogancia que el PP que él contra entregó la vara de mando a este showman de la escuela de Jesús Gil para que el ‘clan de los Baltar’ siga controlando con modos anacrónicos la Diputación de Ourense.

    ALCALDÍA POR DIPUTACIÓN: JACOME AL PODER

    Gonzalo Pérez Jácome no obtuvo siquiera el acta de concejalía en su debut como candidato a la alcaldía de Ourense, allá por 2003. Pero este empresario poco a poco se fue haciendo un hueco en la política local tras convertirse en azote del bipartidismo.

    Pero llegó 2019 y Democracia Ourensana pactó con su enemigo número uno, José Manuel Baltar. Jácome afirmó que en las elecciones tenían «un objetivo primario y varios secundarios. Nos fue totalmente imposible conseguir los dos objetivos. El primario, era la alcaldía y el secundario era el de la Diputación. Ser alcalde de Ourense es más importante que la presidencia de la Diputación, porque a lo mejor se producía un relevo que no significa que Ourense fuera mejorar».

    «Hemos hecho una carambola que es beneficiosa para Ourense, aunque mucha gente pedía el pleno al 15», añadió. Lo que no contó es que Democracia Ourensana se cayó de las últimas elecciones autonómicas para alegría de Feijóo, que se vio beneficiado por el siniestro pacto en la ciudad de As Burgas.

    GENIO Y FIGURA

    Jácome fue investido el año pasado y desplegó un discurso propio de un niño que gana el puesto a delegado de la clase: «Este es la tercera vez que soy concelleiro (concejal) y a la tercera va la vencida. Se cumple el refrán, y también se cumple el refrán de que esta es la quinta vez que me presento para alcalde de Ourense, y dicen que no hay quinto malo. Se van cumpliendo todos los refranes.»

    El alcalde no se quedó ahí: «He fracasado en casi todas las ilusiones que he tenido en mi vida, por diversos motivos. Uno de los motivos es que he abandonado antes de tiempo, he muerto en la orilla. Otras veces me equivoqué de camino, por ejemplo en atletismo, yo soñaba con ser un gran campeón hasta que me di cuenta de que para eso hay que nacer». 

    «A mí me gusta mucho aplazar las cosas, procrastinar, y realmente no se puede procrastinar en política, porque hay unos plazos, yo no le puedo decir a la junta electoral por favor aplacen el día de las elecciones para dentro de un mes, que me va mejor a mí. Si yo en cuatro años no consigo hacer lo que prometí, lo tendré que volver a poner en la lista de fracasos de mi vida«, añadió.

    NEGRO FUTURO

    Ourense se ve abocada a un pacto entre PP y PSOE, que tendrán que ponerse de acuerdo para desalojar de la alcaldía a un pintoresco empresario que va a tener que demostrar de dónde salen los ingresos de Democracia Ourensana.

    Cierto es que Jácome ha perdido el empuje de antaño y está en mínimos de valoración tras evidenciarse que intentó ‘rapiñar’ el sueldo de sus asesores para mantener en antena un canal semiamateur que podría haber digerido 800.000 euros públicos en los últimos años.