El secretario de Salud Pública de la Generalitat, Josep Maria Argimon, ha asegurado que los menores de 14 años «no son gran contagiadores y podrían no contar» para el número de personas permitidas en las reuniones de Navidad, y ha concretado que entre este lunes y martes decidirán sobre esto y lo pasarán al Procicat.
En declaraciones este lunes en Radio 4 y La 2 recogidas por Europa Press, ha explicado que debe haber un balance: «Realmente no son grandes contagiadores y posiblemente no deberían contar o podrían no contar, pero por otro lado está el hecho de que si abrimos parece que, bueno, ahora dos burbujas, y los niños…», y considera que se daría una imagen de mucha apertura.
«Recomendaría un número de personas pequeño, creo que serán 10» para los encuentros de navidad, ha afirmado el secretario de Salud Pública, que ha destacado que estas 10 personas no pueden pertenecer a más de dos burbujas de convivencia diferentes y ha dicho que esta semana darán recomendaciones sobre la manera de relacionarse en las fiestas.
Ha avisado de que el mes de enero o finales de diciembre pueden ser muy complicados, y ha llamado a hacer encuentros con cuidado y ser muy previsores la semana anterior a estas reuniones familiares, sobre todo si hay personas mayores: «Nuestro objetivo no debe ser llegar a navidad, aún nos quedan muchos meses. Es llegar a enero y febrero con unos buenos datos».
Sobre el puente de la Purísima, el secretario de Salud Pública ha dicho que confía avanzar de tramo de reapertura el lunes 7 de diciembre, en mitad del puente, y ha avanzado que habrá anuncios este miércoles o jueves sobre cuáles serán las condiciones, en función de los datos.
RASTREO
Ha sostenido que el rastreo en Cataluña ahora es «mejor, pero aún falta mucho», ha reconocido que falló en la primera ola de coronavirus, y ha destacado que ahora no hay un problema de efectivos sino de mejorar la coordinación entre diferentes fases, desde que hay un positivo, hasta el seguimiento de los contactos estrechos, y haciendo una investigación más exhaustiva de estos contactos.
Argimon ha asegurado que la app de Radar Covid no se ha aplicado en Cataluña «porque el sistema de información no la ha podido poner en marcha», ha añadido que es una herramienta útil pero no sustituirá al rastreo, y ha concluido que funciona, pero tiene unas limitaciones claras, tras lo que se ha criticado que tampoco se han hecho campañas publicitarias para que la gente se la instale.
TEST DE ANTÍGENOS
También ha advertido sobre la «falsa seguridad» que pueden dar los test de antígenos, de cara a que haya personas que se hagan estos test para poder reunirse en navidad, y ha explicado que aunque diese negativo se podría estar incubando la enfermedad, puntualizando que esa persona sería menos transmisora.
Preguntado por si las farmacias catalanas podrán realizar estos tests, Argimon se ha mostrado partidario de que lo hagan «las que puedan y quieran» cuando se apruebe su administración en ellas, pero ha apuntado que no serán muchas, porque deben tener espacios y estar equipadas, y ha concretado que las farmacias pequeñas no podrán porque hacerlo supone un frotis nasofarígeo y eso genera aerosoles.
Sobre la flexibilización del uso de mascarilla de los menores en las escuelas, Argimon ha sostenido que el desafío es que haya territorios y aulas sin mascarilla a lo largo del curso, y ha añadido que le gustaría que esto pudiese ser realidad «en el tercer trimestre», cuando habrá más normalidad, ha indicado.
Para la vacuna en los centros privados, el secretario de Salud Pública ha explicado que el personal de estos centros también la recibirá y que se seguirá el orden de vacunación, y preguntado por si la gente se podrá vacunar si paga por la privada, ha respondido: «El orden será el orden, de equidad y justicia distributiva».
«Las vacunaciones masivas del plan de vacunación se harán en los centros vacunales actuales y lo de la parte privada veremos», ha afirmado Argimon, que ha añadido que eso no llegará hasta septiembre, octubre o noviembre y que ahora no le preocupa.
Ha dicho que las discrepancias en el Govern son normales y buenas, auque ha reconocido que afectan a la gestión de la pandemia, y ha defendido que «lo que no es bueno son las filtraciones», y que desconoce quién filtró el documento de trabajo sobre la reapertura, pero no pierde el tiempo con eso, en sus palabras.