Arrimadas rechaza que Cs se una al PP

La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha rechazado este jueves la posibilidad de que su partido se fusione con el PP y ha acusado a los ‘populares’ de plantear esta idea como una «cortina de humo» para tapar su mal resultado en las elecciones catalanas del pasado domingo. Además, les ha reprochado que «donde sí era necesario» sumar, en Cataluña, se negaran a formar parte de una candidatura electoral constitucionalista con Cs.

En una entrevista en la cadena COPE, Arrimadas ha dicho que descarta esa unión –sugerida estos días por dirigentes ‘populares’ como la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, o el líder del PP catalán, Alejandro Fernández– porque el PP y Cs son «partidos distintos».

Así, ha indicado que en el Parlamento Europeo, Ciudadanos está integrado en el grupo liberal, mientras que el PP está con las formaciones conservadoras. Y eso, según ha señalado, no impide que los dos partidos se puedan poner de acuerdo «en momentos puntuales» para gobernar juntos en algunos lugares, como ya hacen, o para concurrir en una lista unitaria a elecciones como las del pasado julio en el País Vasco.

Lo que Arrimadas ha dicho no entender es por qué el PP «descartó una lista constitucionalista en Cataluña, que sí era necesaria», y ahora «no sabe diferenciar cuál es el papel de Cs y cuál es el del PP».

En este sentido, ha lamentado que tanto el PSC como los ‘populares’ rechazaran sumar fuerzas ante los comicios catalanes del 14 de febrero, en el caso de estos últimos porque «se pensaban que iban a pasar de cuatro a seis escaños» en el Parlament.

Al final, el PP ha perdido votos respecto a 2017 y ha bajado a tres diputados, y ahora «saca esto como cortina de humo», ha afirmado sobre la idea de la fusión con Cs. «Hay que pensar en España, no en los intereses de partido», ha subrayado.

Arrimadas ha asegurado que ella no busca que el PP o el PSOE dejen de existir, sino que quiere que la gente que lo desee les pueda votar y que también pueda hacerlo por Ciudadanos, «un partido de centro de verdad, moderado, liberal y limpio» que tiene algunos posicionamientos que «tradicionalmente puede ser de izquierdas» y que en otras propuestas está «más con la derecha».

Asimismo, ha apostado por «romper la polarización» política en España porque cree que es «la única manera de que Pablo Iglesias no siga en el Gobierno. Si no, «por mucho que destrocen y que gestionen mal» el PSOE y Unidas Podemos, si los españoles tienen que «elegir entre un bloque u otro», habrá «mucha gente que siga eligiendo el bloque que está gobernando», ha advertido.

Por su parte, el portavoz adjunto de Cs en el Congreso, Edmundo Bal, ha declarado en una entrevista en RNE que le parece «verdaderamente inimaginable» que el expresidente de su partido, Albert Rivera, haya iniciado contactos con el PP y con miembros de Cs al margen de Arrimadas para la fusión de ambos partidos, como publica este jueves el diario ‘La Razón’.

Bal ha explicado que habla con Rivera de vez en cuando y que le ve «contento con su vida profesional», presidiendo un despacho de abogados. Además, ha recordado que cuando dimitió, tras las últimas elecciones generales, afirmó «que no iba a tutelar a Ciudadanos y que abandonaba definitivamente la política». «Siempre me ha parecido una persona de las que cumplen la palabra que dan», ha agregado.

Al igual que Arrimadas, el portavoz parlamentario sostiene que el PP y Cs son «dos partidos netamente diferenciados» y que se puede comprobar a diario en las votaciones del Congreso, en cuestiones como el aborto, la eutanasia o los cuidados paliativos.

También ha separado la visión de «liberalismo económico» de Ciudadanos del «capitalismo de amiguetes» por el que, a su juicio, ha apostado el PP, y ha destacado la defensa de las pymes y los autónomos que hace la formación naranja. Por último, ha resaltado que su partido suele apoyar la creación de comisiones de investigación parlamentarias sobre casos de corrupción y los ‘populares’ lo hacen cuando afectan al PSOE o a Podemos, pero no cuando les conciernen a ellos.

Respecto al resultado de la formación naranja en las elecciones en Cataluña, Arrimadas ha reiterado que fue «muy malo» y que tendrán que «corregir errores», aunque no ha precisado cuáles.

«Lo principal es que se hace autocrítica, se debate y se escucha» y que el partido «está cohesionado», mientras que en otras formaciones políticas «no se habla y sacan cortinas de humo», ha añadido al referirse a la reunión que mantuvo la Ejecutiva nacional de Ciudadanos el lunes pasado. También ha puesto de relieve que el candidato a la Presidencia de la Generalitat, Carlos Carrizosa, y ella misma, han salido a «dar la cara» tras los comicios.

La presidenta de Cs ha señalado que los votantes estaban desmovilizados y que eso en parte es culpa del partido, pero también de la pandemia del coronavirus. Lo que ha admitido es que quizá durante la anterior legislatura no supieron explicar a los catalanes todo el trabajo que han realizado desde la oposición en el Parlament.

De todas formas, ha abogado por mirar lo que ocurre fuera del partido y no estar siempre mirándose «el ombligo», porque en ese caso se puede tener «la tentación de hacer algo que da votos» aunque no sea «lo correcto». Es lo que considera que ha hecho el PSOE, que ha ganado las elecciones catalanas tras pactar en el Congreso con Esquerra Republicana de Catalunya y con EH Bildu y presentar como candidato a Salvador Illa, «el peor ministro de Europa en la gestión de la pandemia.

Arrimadas ha defendido que el proyecto que inició hace un año, cuando asumió el liderazgo del partido, «se tiene que seguir implantando», y ha dicho tener «mucha fuerza para seguir adelante». «Estoy convencida de que tenemos que seguir haciendo lo correcto, que a veces da votos y a veces no da votos», ha manifestado.

Según ha afirmado, lo que más le preocupa ahora es la situación política en Cataluña, donde el constitucionalismo está más débil que antes de los comicios y el separatismo «ha salido reforzado». «Nosotros vamos a seguir siendo la voz de muchos catalanes» y «estoy convencida de que volveremos a ilusionar a millones de españoles», ha declarado.

La líder de Cs, que se ha mostrado segura de que los partidos independentistas formarán gobierno, ha expresado su esperanza de que ahora se pueda «desenmascarar a Illa», que ha prometido intentar su investidura como presidente de la Generalitat.

En su opinión, al candidato socialista le va a ocurrir lo mismo que a ella tras ganar las elecciones de 2017, que no se presentó a la investidura no porque no quisiera, sino porque «no se pudo», al haber ya un candidato independentista con una mayoría en el Parlament.