Una debacle de Iglesias en Madrid podría romper Unidas Podemos en tres pedazos

Pablo Iglesias ha dejado claro que no intentará renovar su liderazgo en Vistalegre IV y por lo tanto una debacle de Unidas Podemos el próximo 4 de mayo en la Comunidad de Madrid podría romper la coalición en varias mitades.

Y es que al menos tres grupos definidos intentarían hacerse con el liderazgo de la coalición ante una posible salida precipitada de su omnímodo líder: Yolanda Díaz, que aspira a reinar en Podemos a pesar de no ser ni inscrita; Irene Montero y su equipo del ministerio de Igualdad; y el dúo que conforman el PCE e Izquierda Unida, con Enrique Santiago y Alberto Garzón a la cabeza.

IGLESIAS DEJA CLARO QUE ENFILA EL CAMINO DE SALIDA

Los infinitos enemigos de Iglesias han querido ver en su salto a la Comunidad de Madrid una estrategia para eternizarse en Podemos como ‘Pepito Grillo’ del bloque socialista del Gobierno central (mientras se libraba de las ataduras de su cargo).

Pero el secretario general de Podemos ha dejado claro que deja la vicepresidencia segunda y su escaño en el Congreso para vivir una última aventura política como candidato en la Comunidad de Madrid, seguramente con más intención de salvar las expectativas futuras de su partido que de alcanzar una mayoría progresista contra Isabel Díaz Ayuso.

ENRIQUE SANTIAGO, NUEVO HOMBRE FUERTE EN UNIDAS PODEMOS

La buena reputación mediática de Yolanda Díaz no le va a facilitar que se acerque siquiera al nivel de apoyos que tiene a nivel interno Pablo Iglesias en Unidas Podemos. La vicepresidenta tercera se las tendrá que ver con Irene Montero, que mira con recelos su meteórico ascenso; y con el PCE de Enrique Santiago, que ve a Díaz con buenos ojos pero intentará que el bloque de IU gane peso en la cúpula de la coalición.

Enrique Santiago se presume como uno de los hombres a tener muy en cuenta en Unidas Podemos. El secretario general del PCE ha conseguido en los últimos tiempos ganar peso dentro de la coalición, alcanzando de paso la secretaría de Estado de la Agenda 2030.

EL PCE LO INTENTARÁ

Santiago está batallando contra los prejuicios que rodean a los comunistas en España. Tal y como recordó en el Congreso, «en España los comunistas fuimos la única oposición al franquismo durante la mayor parte de la dictadura. Mientras Fraga aprobaba la condena a muerte de Grimau, el PCE se comprometía con la reconciliación nacional. Impulsarnos el pacto constitucional y dimos apoyo a la Constitución Española que a ustedes (el PP) tanto les costó aceptar».

«Los comunistas hemos saludado que el PP aceptara la democracia, aunque siempre hayan rechazado condenar en el Pleno de esta Cámara el franquismo, régimen aliado de Hitler y de Mussolini. A pesar de que el Partido Popular fue fundado por franquistas que acordaron penas de muerte contra militantes del PCE por hacer oposición política a una dictadura. Pretender equiparar a víctimas y victimarios es complicidad con crímenes de lesa humanidad», explicaba el diputado.

Para Santiago, «equiparar nazismo con cualquier otra ideología es banalizar el mal y los crímenes contra la humanidad que Hitler y Mussolini perpetraron. El único régimen político que ha planificado y ejecutado la eliminación sistemática de forma industrial de colectivos y pueblos enteros ha sido el nazismo: comunistas, gitanos, judíos, homosexuales y discapacitados fueron los eliminados. Ante tanta maldad hubo que crear el delito de genocidio».

«Cualquier equiparación del nazismo con otro sistema político es complicidad y negacionismo. Es normal que la ultraderecha que ha calificado el franquismo como mejor gobierno que el actual presentara una proposición no de ley como ésta, lo que no es normal es que el Partido Popular caiga tan bajo», añadió.