El ministro de Política Territorial, Miquel Iceta, ha reivindicado este jueves el federalismo y la cooperación entre administraciones ante la experiencia vivida con la pandemia de Covid-19, así como ha abogado por «formalizar más» la herramienta de las Conferencias de Presidentes autonómicos.
Son algunas de las reflexiones que ha lanzado el ministro durante su intervención en la clausura del Foro Económico ‘La Andalucía post- Covid’ organizado en Sevilla por el periódico digital ‘El Español’, y donde Iceta ha abordado cuatro «enseñanzas» que, a su juicio, deja la pandemia.
Una de ellas es, según ha defendido, la «importancia de la cooperación y el federalismo», porque «ha quedado clarísimo que una comunidad autónoma o un Estado por sí solo no puede hacer frente a un reto tan grande» como el de la pandemia actual, y «juntos podemos ser más eficaces».
Ha añadido que el federalismo «comprende dos cosas», que son «autogobierno y gobierno compartido» a favor del «bienestar de todos», y al hilo ha llamado la atención acerca de que, «cuando la pandemia era más dura, estaba más desbocada, parece que éramos todos más proclives a aceptar la cooperación», pero «ahora parece que volvemos a tener algunos problemas para ponernos de acuerdo cuando parece que estamos venciendo» la crisis sanitaria.
Tras reivindicar la importancia del «mundo local» como «primer eslabón de la cadena de cooperación», ha subrayado que «nuestro país es felizmente diverso, pero es un país», por lo que «hemos de ser capaces de combinar» el «autogobierno» con «el diseño y la defensa de un proyecto común».
Iceta ha defendido que «el federalismo pretende ser lo mejor de dos mundos, el de la proximidad y la manera de estar en un mundo cada vez más complejo que requiere de poderes públicos fuertes, eficaces, colaboradores, tanto a nivel de cada país como europeo», y en esa línea ha apostado por «avanzar en una cooperación más estrecha».
REFORMA DE LA CONSTITUCIÓN
El ministro ha recordado que es «partidario de reformar la Constitución», pero ha matizado que «sólo podremos reformar la Constitución si nos ponemos de acuerdo muchos», de modo que ese reto «no ha de ser un instrumento de erosión política, sino un elemento de transformación política», y no un «escenario en el que pelearnos, sino un ámbito en el que construir juntos».
«No sé si llegará el momento, más pronto o más tarde, en el que podamos ponernos a la labor, pero estamos viendo que los instrumentos federales deben desarrollarse», ha abundado el ministro, que al hilo ha aludido a la Conferencia de Presidentes, que «debemos ser capaces de formalizar más», según ha opinado.
En esa línea, ha dicho que él distingue «entre reunión y conferencia de presidentes», algo esto último que «debe tener elementos de mayor estabilidad y de mayor integración, tanto en la confección del orden del día como en el seguimiento de los acuerdos y la posibilidad de tener una Secretaría permanente» que a él le «gustaría que se instalase en el Senado», según ha comentado.
También ha citado como instrumento de cooperación el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, a cuyas reuniones semanales está asistiendo desde su nombramiento como ministro, según ha recordado, y donde ha dicho que siente «cierta emoción y orgullo» cuando escucha a los consejeros autonómicos, porque «han demostrado el celo por preservar sus competencias, pero también la mejor de las voluntades» por ayudarse entre ellos.
Iceta ha incidido en que «tendremos que intentar avanzar, formalizar esos mecanismos de forma que contribuyamos a una mejor integración del conjunto», y ha indicado que en España «faltan dos cosas importantes» en su concepción de Estado federal. Carecemos de instituciones federales y nos falta una cultura federal, que quiere decir lealtad, sometimiento a la ley, lealtad de los unos con los otros», ha abundado antes de reivindicar que las comunidades autónomas tengan «mayor incidencia en la política española», porque «así somos capaces de recoger la diversidad de los pueblos de España.
«ÉXITO BESTIAL» DE LA CAMPAÑA DE VACUNACIÓN
De igual modo, el ministro ha felicitado a los gobiernos autonómicos por el «éxito bestial» de la campaña de vacunación ante la Covid-19, y ha reconocido que tenía «dudas sobre que fuésemos capaces de hacer las cosas tan bien en un Estado descentralizado como el nuestro», en el que las competencias de sanidad están transferidas a las autonomías, pero donde la pandemia ha obligado a que la Administración central asumiera «un papel de coordinador» que las comunidades han aceptado, según ha valorado.
En todo caso, por delante de la importancia de la cooperación y el federalismo, el ministro ha citado como primera enseñanza de la pandemia la de la «importancia de lo público», y en esa línea ha puesto de relieve la labor de los empleados públicos –sanitarios, docentes, administrativos o efectivos de seguridad, entre otros– durante la crisis sanitaria, y ha dicho que espera que «eso nos sirva a todos para recordar que no podemos escatimar en financiar bien lo público», porque «ahorrar en servicios públicos es recortar el futuro de nuestra sociedad».
Otra enseñanza de la pandemia, según ha continuado Iceta, es «la importancia de Europa«, porque «no hubiéramos podido tener vacunas como hemos tenido sin la UE», sin una Unión Europea «dispuesta a asumir un papel de coordinación en la compra» de las mismas, según ha añadido el ministro, quien también ha reivindicado la solidaridad como «un valor que no se puede perder en una pandemia», porque «una lucha contra una pandemia, o es mundial o fracasará.
Finalmente, Iceta ha reivindicado la «importancia de prever, pensar y preparar el futuro» para que «no nos pille con la guardia baja», y ha subrayado que «un futuro mejor no llega como un premio de un juego de azar, sino si colectivamente somos capaces de planificarlo».
El ministro de Política Territorial ha concluido llamando a «aprovechar las crisis para convertirlas en oportunidades», y a salir de esta pandemia «más fuertes, más competitivos, más cohesionados, sin tantos desequilibrios territoriales como hay en nuestro país», cuyos ciudadanos «han cumplido» en esta crisis sanitaria, según ha valorado antes de apostillar que cree que España es un país «más disciplinado y tiene un futuro más prometedor de lo que a veces creemos», según ha finalizado.