WWF ha reclamado al Gobierno que evite mutaciones supercontagiosas del virus SARS-COV-2 y evite poner en peligro la recuperación de la pandemia a través del cierre las 27 granjas de visón americano que existen en España.
La ONG asegura que cerca de la mitad de las explotaciones peleteras han registrado brotes de COVID-19 y alerta de que las nuevas mutaciones a partir de visones americanos pueden ser «supercontagiosas». La ONG lanzó hace varios meses una campaña en la que pide el cierre de las granjas de visón en España.
El Ministerio de Sanidad ha incluido los contagios de coronavirus procedentes del visón americano entre las tres únicas excepciones en las que hay que mantener una cuarentena obligatoria incluso para personas vacunadas o con anticuerpos, tras el contacto directo con una persona contagiada.
Para WWF, este reconocimiento avala los temores de que los contagios de visón a humano generan más riesgo de mutaciones supercontagiosas, además de amenazar la eficacia de las vacunas y, con ello, la victoria frente al virus.
Para la ONG existe un «riesgo real» de que el paso del coronavirus por esos animales pueda provocar la aparición de variantes con una mayor capacidad de contagio entre los seres humanos, como ya ha ocurrido con variantes como la Delta.
Para la responsable del programa de especies de WWF España, Gemma Rodríguez es una «total irresponsabilidad» seguir permitiendo estas granjas de visones americanos en plena pandemia porque al poder generar variaciones «supercontagiosas» del virus, constituyen «una bomba sanitaria de alto riesgo ante la desidia de nuestros políticos, mientras en otros países ya se están cerrando».