IU y Más Madrid presionan a Yolanda Díaz para montar una plataforma que destiña el color morado

La vicepresidenta Yolanda Díaz tiene cada vez más claro que si quiere hacer mella al PSOE debe presentarse a las elecciones sin las siglas de Podemos. La idea que lanzó el exjefe de gabinete de Presidencia de Gobierno Iván Redondo en un principio en la entrevista de Jordi Évole ha calado en el entorno de Díaz y ya buscan la fórmula para montar una plataforma independiente en tiempo récord. La idea siempre ha revoloteado por el Ministerio de Trabajo y sobretodo en Izquierda Unida, pero lo cierto es que el avance en las investigaciones por los presuntos pagos de Venezuela a dirigentes de Podemos ha enturbiado tanto la imagen morada que Díaz tiene claro que debe lanzarse a la piscina con otros colores. Izquierda Unida, de hecho, también presiona para quitarse de encima el color morado y buscar una nueva forma de integrar a toda la izquierda… incluidos Más Madrid.

Izquierda Unida, antiguo partido de Díaz y formación que tiene a muchos dirigentes en el entorno de la también ministra de Trabajo son los primeros que están presionando para que Díaz de el paso de montar la plataforma. Ella sola está tirando incluso en el CIS de Tezanos de la formación morada a pesar de la buena cantidad de estigmas que pesan sobre ella. Y el hecho de que ahora la Justicia siga investigando presuntos pagos por parte de Venezuela a la formación morada con personajes como Juan Carlos Monedero con supuestas bolsas de dinero cobradas directamente del régimen chavista no ayudan a que las siglas de Podemos consigan remontar en los sondeos. Pero Díaz quiere e Izquierda Unida aprieta para empujar a la ministra a que se lo monte por su cuenta, aunque quieran tener a todo el equipo de la ministra de Igualdad, Irene Montero, y de Ione Belarra bajo su ala.

Las investigaciones contra Podemos se han archivado la mayoría de las veces, pero que ahora el Pollo Carvajal, exjefe de la Inteligencia venezolana, esté aportando supuestas pruebas que acreditan la presunta financiación ilegal de la formación morada no ayuda a mejorar la imagen de un partido que aún siente el peso de las purgas de Pablo Iglesias. El propio juez que investiga el caso entiende que los servicios que debía haber prestado la consultora Neurona a Podemos no se dieron y desliza la necesidad de que se investigue por qué se pagó esa buena cantidad de dinero a Podemos a través de esa empresa. Todo esto ha llevado a Yolanda Díaz a sopesar la posibilidad de montárselo por su cuenta más pronto que tarde.

Yolanda se ha convertido en la nueva referencia de la izquierda, algo que vio Pablo Iglesias antes de dejar la política. Los resultados de las encuestas, el CIS y los sondeos que maneja el propio Sánchez a nivel interno auguran que Yolanda Díaz es un fenómeno que no se quedará en nada, sino que desangrará con toda posibilidad al PSOE por la izquierda y que incluso se habla de que podría ser la próxima (y primera) presidenta del Gobierno de España. Todo esto hace que Yolanda se plantee incluso el seguir el consejo de Redondo y, arengada por Izquierda Unida y por Más Madrid, se plantee aprovechar el 2022 para montar su partido. Eso siempre que Sánchez no cumpla su amenaza de adelantar las elecciones a ese año, algo que se comenta mucho en Ferraz.

Más Madrid e Izquierda Unida son las dos formaciones que más invitan a Yolanda a que dé un paso al frente y se monte un partido por su cuenta. Ambos entienden que o bien han sido fagocitados por Pablo Iglesias, como es el caso de IU, o bien han sido purgados por la formación morada, como es el caso de Íñigo Errejón. La presencia de Díaz, su tirón y sobretodo que sea una «independiente» han llevado a los dos partidos progresistas a creer que la reunificación de la izquierda es posible bajo el mandato de la vicepresidenta.

Que vaya a ser así es un sueño dado que Podemos seguirá queriendo un papel predominante en la formación. El problema es que lo que antes era sinónimo de éxito ahora puede acabar manchado por los presuntos pagos de Venezuela al partido de Pablo Iglesias. Sea como sea, parece que la izquierda alternativa a Podemos se ha convertido en la nueva guardia personal de la ministra de Trabajo. Ministra que por otro lado puso en la rampa de salida el propio Iglesias.

REDONDO, ¿CON YOLANDA?

La buena relación entre Pablo Iglesias e Iván Redondo parece que da sus frutos. Que se llevan bien y que intercambian mensajes casi a diario no es ningún misterio. El problema es que parece que esta relación puede acabar con un nuevo puesto de trabajo para Iván Redondo. El vicepresidente del Gobierno ya designó a Yolanda Díaz como su sucesora. Cuando dejó la política en mayo de 2021, tenía claro que la candidata de la izquierda debía ser la ministra de Trabajo y vicepresidenta social del Gobierno. Sin embargo, ahora parece que Iglesias ha visto el cielo abierto para hacer de Díaz la primera presidenta del Gobierno de España: la posibilidad de sumar a Iván Redondo como director de campaña. El exjefe de gabinete de Presidencia del Gobierno no lo ve con malos ojos y de hecho ha utilizado todas las cámaras para lanzar guiños a la vicepresidenta. Guiños que Yolanda aún no ha correspondido, pero que Iglesias parece estar esforzándose vía Whatsapp para lanzar la idea de que Redondo podría estar en su equipo como director de orquesta. El último artículo de Redondo para La Vanguardia lo deja claro: Yolanda Díaz puede ser presidenta.