El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, niega un adelanto electoral en su comunidad autónoma. Sin embargo, fuentes próximas a Génova apuntan a esta posibilidad. «Se adelantarán. No nos fiamos de Ciudadanos«, han asegurado.
Y es que, Mañueco se juega la posibilidad de una nueva moción de censura en la Junta. El PSOE lo intentó el pasado 10 de marzo, y según los estatutos parlamentarios, es posible poder presentar otra una vez pasado el año. Los socialistas liderados por Luis Tudanca tan sólo necesitan a tres tránsfugas de Ciudadanos para poder sacar adelante un cambio de Gobierno.
Pero en el PP castellanoleonés no quieren sorpresas de ningún tipo. La moción de censura podría prosperar, pero sería por la elección de los votantes. En las urnas. Sin pactos de transfuguismo como se intentó en Murcia, en un burdo intento de Ciudadanos para hacerse con la autonomía junto al ‘sanchismo’. Por este motivo, los ‘populares’ no se fían de sus actuales socios de gobierno. Saben que con tres díscolos sería suficiente para tumbar a Mañueco y cosechar el rédito de cara a las elecciones de 2023.
EL PSOE DE SÁNCHEZ TRATA DE CASTIGAR A MAÑUECO
El Gobierno de Pedro Sánchez ha actuado hasta ahora como el ariete del PSOE de Castilla y León. A modo de castigo, ha obligado a cerrar la estación de Navacerrada en pleno puente de la Constitución, pero un tribunal le ha dado la razón a Mañueco. No será el último intento de los socialistas para tratar de desestabilizar la coalición entre azules y naranjas.
El escenario en Castilla y León es similar al de Andalucía. Mañueco está inmerso en la elaboración de los Presupuestos, pero sería difícil pensar que va a dejar el trabajo hecho al próximo gobierno. En este sentido, Ciudadanos y ‘populares’ tratan de encontrar la excusa para romper el acuerdo de legislatura y lanzarse a las urnas.
El pasado mes de septiembre se escenificó esta ruptura. Los de Mañueco votaron a favor de una Proposición No de Ley de los socialistas para retirar el plan de restructuración de atención primaria en el medio rural, desautorizando así a la consejera de Sanidad, la ‘naranja’ Verónica Casado. Pero eran fuegos de artificio. Buscar la excusa es fácil. Un desacuerdo en partidas presupuestarias rompería las negociaciones para poner la alfombra a la elecciones.
Mañueco, además, ha descartado por completo ir en coalición con Ciudadanos a estos próximos comicios. «El PP es la única marca que aglutina al centro derecha«, afirman las fuentes consultadas. Como en Andalucía, Ciudadanos se jugará su propio futuro en solitario. Las encuestas publicadas hasta ahora dan una holgada victoria a los ‘populares’, que escalarían a los 37 escaños frente a los 29 actuales.
EL ADELANTO ELECTORAL DE MAÑUECO HUNDIRÍA A CS
El PSOE de Tudanca, por su parte, se hundiría a los 27 frente a los 35. Los peor parados serían los de Francisco García Igea, que obtendrían tan sólo un diputado en las Cortes, desde los 12 actuales. Vox, que no tiene representación, se llevaría un buen resultado con hasta doce escaños.
La otra formación en liza, Podemos, podría dejar paso a la nueva plataforma de Yolanda Díaz. La nueva plataforma no tendría casi tiempo de reacción para concurrir en estos comicios y dejaría su oportunidad únicamente para Andalucía.
En estos momentos estoy preocupado única y exclusivamente por las personas de Castilla y León y protegerlas de las políticas del sanchismo
Para el adelanto electoral, Mañueco debe enfrentarse antes a su Congreso autonómico. De los provinciales aún falta el de Salamanca, atrasado debido a un presunto caso de corrupción. El líder de los ‘populares’, sin embargo, no tiene rival, pese a no ser el hombre fuerte de Pablo Casado en la Comunidad. De hecho, la hostilidad entre ambos es manifiesta, pese a intentar limar asperezas.
Si desde Génova han purgado a cargos ‘populares’, Mañueco les recolocaba en algunos otros puestos autonómicos. Esta desconfianza no pasa inadvertida, pese a los intentos de uno y otro lado de mostrar una actitud cordial e incluso amistosa. «La gestión en Castilla y León funciona: bajada de impuestos, calidad educativa y refuerzo para la sanidad y dependencia«, ha afirmado Casado en los últimos días.
MAÑUECO Y CASADO, ENEMISTAD MANIFIESTA
Son puros fuegos de artificio, palabras vacuas y vacías de cara a mostrar una buena sintonía tras la guerra interna iniciada contra Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid.
Mañueco se someterá al Congreso autonómico en el «primer trimestre de 2022». No le quedará más remedio que adelantarlo a enero, con el fin de afianzar su liderazgo tras las fechas navideñas y evitar que alguno se atreva a disputarle el puesto. Por activa y por pasiva ha negado que haya un adelanto electoral, pero desde Génova lo tienen cada vez más claro. Tanto que hasta sus portavoces afirman que Mañueco tiene vía libre.
«En estos momentos estoy preocupado única y exclusivamente por las personas de Castilla y León y protegerlas de las políticas del sanchismo«, ha afirmado Mañueco sobre las elecciones.
Según el presidente de la Junta, los principales objetivos pasan por aprobar los Presupuestos autonómicos y la política agraria Común, crucial para esta parte de la España vaciada.
EN GÉNOVA DEJAN HACER AL PP DE CYL
En Génova no tienen prisa por el adelanto electoral, pero los cálculos lo tienen claro. Si hay elecciones en primavera, Mañueco deberá convocarlas en febrero. Por este motivo, es necesario el Congreso ‘popular’ en enero.
El PSOE, por su parte, sabe que no tendrá tiempo de reacción si el adelanto se produce de cara a primavera. Públicamente, los socialistas tratan de quitar hierro a este posible escenario, pero en privado hay nervios. Tudanca tiene que componer su lista en medio de la nefasta gestión del Gobierno en la España vaciada, donde no se han implementado medidas de calado pese a gobernar desde 2019.
Por esta razón, La España Vaciada, una plataforma afín a Yolanda Díaz, tratará de dar la cara en estos comicios. Los de Pedro Sánchez han dado orden de desactivarla por completo ya que resta votos. Pasó con Teruel Existe, y un movimiento de esta calado en una población como Castilla y León podría suponer un contratiempo no sólo para el PSOE, sino también para Mañueco. Y es que, las elecciones pueden arrojar un resultado ajustado.
