La Comunidad Autónoma, de la mano del sector agrario, trasladará su «preocupación e incertidumbre» al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación en el documento de alegaciones al Plan Estratégico Nacional de la futura PAC (PEPAC), hecho público el pasado día 30 de noviembre, que ha quedado este lunes consensuado tras la reunión entre el consejero de Agua, Agricultura, Ganadería, Pesca y Medio Ambiente, Antonio Luengo, y representantes de distintas organizaciones vinculadas al sector, según informaron fuentes del Gobierno regional en un comunicado.
Luengo ha puesto de relieve que el Gobierno regional «ha buscado a lo largo de este proceso el máximo consenso con el sector agrario, porque somos su altavoz y defensores de sus intereses, que son los de la Región, por lo que representa el peso que tiene en nuestra economía», y ha enfatizado que la Comunidad Autónoma «ha defendido ante el Gobierno nacional y ante Europa las reivindicaciones y exigencias de nuestros agricultores y ganaderos porque en ellos está el futuro del sector agrario y porque deben recibir las ayudas que les son tan necesarias como justas».
El consejero, que ya se opuso en julio al documento presentado por el ministro en la Conferencia Sectorial sobre la PAC para el período 2023-2027 «al no recoger las necesidades de los agricultores y ganaderos de la Región de Murcia», por lo que «reiteramos que existe un sentimiento de rechazo al conjunto del Plan, al no recoger aspiraciones básicas del sector, como la supresión del carácter histórico de los derechos o del desmesurado número de regiones», así como por el hecho de «desaprovechar la ocasión para redirigir la PAC hacia un modelo más acorde con las realidad agraria, actual y al mismo tiempo la apuesta ecológica que se demanda desde Europa».
En las alegaciones que se plantean, se incide, entre otras cuestiones, «en que vaya realmente dirigida al sector profesional, para lo que aquel que se considera agricultor activo debe de ser agricultor profesional. Del mismo modo, planteamos que el sistema de distribución de las ayudas sea más justo y equitativo, en función de la realidad agraria actual; y se reitera que los eco-esquemas no recogen la climatología del sureste español», ha indicado Luengo.
También se pone de relieve que las ayudas asociadas «deben mejorar su concepto de desertificación y otorgar un mayor apoyo al sector ganadero, sobre todo a la ganadería sin base territorial; y, desde luego, incluir a la flor cortada y planta ornamental como programa sectorial, conforme al compromiso asumido el pasado mes de febrero por el ministro de Agricultura».
Luengo ha señalado que la PAC «surgió para equilibrar rentas, y la Región de Murcia se encuentra, y seguirá siendo así, entre las regiones productivas que menos perciben, cuando debería percibir más por su realidad productiva».
Esta nueva PAC «nació con unas expectativas de cambio, pero con los planteamientos actuales va a seguir siendo una PAC injusta, porque dos explotaciones iguales deberían tener la misma PAC, independientemente de su situación geográfica», ha concluido el consejero.
La Comunidad Autónoma y las entidades del sector agrario regional presentarán su documento de alegaciones esta semana, con el fin de que incluyan en el Plan Estratégico Nacional, que será remitido a la Unión Europea para su aprobación en un plazo de seis meses. La nueva PAC se aplicará a partir del 1 de enero de 2023.