El pan es un alimento que a todos nos encanta y que solemos consumir a diario den algún momento del día. En el desayuno, a media mañana, para acompañar tapas o meriendas, suele dar mucho juego y servir como complemento perfecto en cualquier plato. Pero si algo nos gusta especialmente es el pan casero, esponjoso y si puede ser, caliente. Toda una delicia con la que podemos conquistar a cualquier estómago, además de disfrutar del placer de elaborar un rico pan con nuestras propias manos.
7EL HORNEADO DEL PAN

Precalentamos el horno a 220ºC arriba y abajo e introducimos nuestro pan sin sacarlo del recipiente, y con una tapa de papel de aluminio. Lo colocamos en la bandeja central y lo dejamos durante 40 minutos. En este tiempo el pan crecerá como si hubiese reposado fuera del horno, pero más rápido gracias al calor, la humedad y el reciente. Transcurrido este tiempo, quitamos la tapa de papel de aluminio y volvemos a hornear esta vez durante 25 minutos más. Y ya tendríamos nuestro bollo de pan cocido y muy esponjoso. Lo sacamos del horno y esperamos a que se enfríe un poco, para que se compacte un poco la miga y sea más fácil de cortar.