La ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, ha apostado este jueves por «desmontar los roles de género» porque «limitan las vocaciones» científicas de las niñas. «A pesar de obtener iguales o mejores notas que sus compañeros en asignaturas como las matemáticas, se perciben trabajadoras pero no brillantes en estas materias».
Así lo ha advertido en la inauguración de la jornada ‘Mujeres y Digitalización, por una España Igualitaria’ que ha organizado el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital.
Morant ha lamentado que las niñas, al estar «condicionadas por esos estereotipos de género, no se ven trabajando en ciertas áreas científicas y tecnológicas donde precisamente se encuentran algunas de las profesiones de mayor calidad, que además son estratégicas para el diseño del porvenir».
La ministra destaca que «sumar el talento de las mujeres es un reto de país fundamental para la construcción de un futuro más próspero, verde, equitativo y justo», por eso ha instado a «combatir las brechas de género en la ciencia y la innovación», un objetivo en el que el Ministerio está avanzando a través de tres grandes retos, según ha subrayado.
El primero de estos tres grandes retos es «atraer a más niñas y jóvenes a los ámbitos de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas», las carreras denominadas STEM, donde las mujeres todavía son minoría.
Ante esta situación, Morant ha abogado por hacer ver a las niñas y a la sociedad que «el talento no tiene género, que sí pueden, claro que pueden». «Y lo hacemos, visibilizando y acercando les ejemplos reales tanto de investigadoras como de innovadoras, pioneras y ocultadas por la historia como de las inspiradoras actuales», añade.
El segundo reto es «retener el talento de las mujeres y apoyar su liderazgo». En este sentido, Morant celebra que en España se ha acelerado la presencia de la mujer en la I+D+I desde el año 2018. Aunque en España, el porcentaje de mujeres que trabajan en investigación e innovación supera la media europea, «todavía no ocupan ni la cuarta parte de los puestos de decisión».
Y el tercer reto que ha reseñado Morant es «asegurar precisamente una ciencia y una innovación que tengan en cuenta las necesidades y características y circunstancias de mujeres y hombres por igual», incluyendo así la perspectiva de género en la investigación científica, en sus resultados y en la transferencia de conocimiento.
Por último, la ministra ha querido destacar la reforma de la Ley de la Ciencia, que por primera vez aborda la transversalidad de género en las políticas de ciencia y de innovación y da respaldo jurídico a la igualdad de género en la I+D+I.