Luis Planas es un gran defensor de la caza y sobre todo de los cazadores. El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación tiene claro que los cazadores son un nicho a tener en cuenta, ya que pueden suponer una gran parte del voto socialista. Tratar de convencer a este colectivo se ha convertido en una obsesión para Planas, tanto es así que a la menor oportunidad no duda en destinar elevadas cantidades de dinero al colectivo de los cazadores. La última fue a través de un convenio por valor de 648.000 euros, que el ministro firmó junto a la Fundación Artemisan. Este acuerdo se llevó a cabo con el principal objetivo de controlar las especies de la tórtola europea y la perdiz roja. Sin embargo, parece que esto solo era una excusa para seguir afianzando el voto de los cazadores y otorgarles una elevada cantidad de dinero como guiño a este nicho de votantes. Y es que, quien realmente llevará a cabo esta labor será Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), a quien Planas ha pedido ayuda para controlar la población de tórtola europea que hay en nuestro país.
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación ha anunciado que colaborará con CSIC en la mejorar de la población de la tórtola europea. El objetivo de este acuerdo es que la institución científica elabore una guía de estimación de abundancias y densidades poblacionales, la obtención de datos de supervivencia de los individuos jóvenes y adultos por medio de métodos de anillamiento. Así como la realización de un catálogo priorizado de medidas de gestión de hábitats y ecosistemas, y la armonización y análisis de los datos obtenidos. Además, la colaboración servirá para la implementación de un mecanismo para monitorizar el estado de conservación de la tórtola europea con el que se pretende mejorar el estado de las poblaciones de estas aves en nuestro país, en línea con las directrices de la Directiva Aves.
EL CSIC SE ENCARGARÁ DE CONTROLAR LA POBLACIÓN DE TÓRTOLA EUROPEA
Para llevar a cabo esta colaboración, el titular de Agricultura, Pesca y Alimentación invertirá un presupuesto que ronda los 115.000 euros y que será gestionado por la institución científica de CSIC. Y es que, España abarca un 80 % de la población de tórtola europea del corredor migratorio occidental, por lo que resulta clave el desarrollo de un plan de gestión adaptativo que tenga en cuenta la monitorización de las abundancias. Parece ser que Planas tiene claro que el dinero se lo van a llevar los cazadores pero el trabajo lo va a llevar a cabo el departamento de investigaciones científicas. Sin embargo, no sorprende demasiado este movimiento dado que Planas no ha dejado de destinar dinero a los cazadores.
Y es que, hace menos de un mes el titular de Agricultura y López-Schümmer firmaron un convenio dotado con 1.295.644,44 millones de euros de inversión. De los cuales, el departamento que dirige Planas debía aportar 648.000 euros. Un dinero que se invertirá en la implementación de un observatorio cinegético, el establecimiento de una red de cotos demostrativos y el desarrollo de una red de cotos piloto. Además, se financiará el Observatorio Cinegético, un sistema pionero de ciencia ciudadana que la fundación impulsó hace algo más de dos años y que está dando lugar a una red de censadores de especies a través de la aplicación CensData, que permite obtener información en tiempo real de la situación de las distintas poblaciones. Las especies sobre las que pondrán el foco son la tórtola europea y la perdiz roja.
Lo que está claro es que Planas sabe del lado del que le gusta estar, por quién le gusta trabajar, por lo cazadores. Es una de las obsesiones del ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, sabe que los cazadores son un gran nicho de votantes y, cada vez que tiene la menor oportunidad, no duda en concederles subvenciones, contratos o convenio que le permitan destinar elevadas cantidades de dinero al sector cinegético. Desde el lobo ibérico a la cría de perros, son algunas de las cuestiones por las que Planas y su equipo han luchado contra viento y marea, aunque eso haya implicado enfrentarse a otros miembros del Ejecutivo.
Y es que, que Planas es muy amigo de los cazadores no es ningún secreto, pero esta no es la única cuestión por la que Agricultura defiende «con pasión» la caza. El propio ministro ha configurado su equipo rodeándose de cazadores para apoyar así a la actividad cinegética. Sin embargo, esta es una cuestión que choca con muchos de los miembros del Gobierno, en especial, con los de la bancada de Unidas Podemos, aunque entre las filas socialistas también hay políticos que no ven con buenos ojos que algunas personas se dediquen a matar animales como deporte. Una política del PSOE que ha demostrado que no le gustan estas prácticas es la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, quien anunció su intención de prohibir la caza de la codorniz. Una cuestión que parece no preocupar lo más mínimo a Planas quien probablemente continuará regalando dinero a los cazadores cada vez que pueda.
